R-evolución. El retail no se para
“El Corte Inglés no se para”. Las palabras de Diego Copado, director de comunicación y relaciones externas del grupo líder, en la presentación de Castellana 85, su nueva oferta en muebles, son un buen resumen de 2010. El Corte Inglés no se para. Por extensión, el retail no se para. No se han parado buena parte de los retailers, domésticos o extradomésticos, cuya frenética actividad podría dar la impresión de boyante periodo económico.
Doce meses después de las últimas uvas, los resultados para sectores como electro, hogar o textil rozan los niveles de 2005. Otros, como el alimentario, acusa por segundo año consecutivo la desenfrenada guerra de precio bajo y MDD con saldo negativo en valor a corto plazo y posibles consecuencias a medio y largo. Pese a las cifras, pasado el primer momento de toda crisis, asumirla, y el siguiente paso, reducir costes ante la pérdida de ventas y beneficios, las empresas se enfrentan a la más difícil puesta a punto. Revisar procesos y equipos, detectar partes dormidas del negocio, crear ideas nuevas. En definitiva, se trata de innovar. De forma conservadora – con “i” minúscula como se conoce en términos de innovación- o con “I” mayúscula como auténtica revolución. Una estrategia de mayor riesgo pero con más alta probabilidad de llegar en buena posición a la salida.
Empujados por la nueva sociedad del conocimiento – información, tecnología, consumidores- en este segundo estadio se han situado algunos retailers. Innovación con mayúsculas en El Corte Inglés con sus tiendas multimarca, shop in shop, fast food, espacios gourmets, muebles o marcas de lujo o sus acciones comerciales en Facebook. Grandes dosis de creatividad en Inditex y su portal Zara, principal impulsor de velocidad de otros y de la multiplicación por cinco del valor de la venta de ropa online. Revolución en Carrefour y el gran vuelco al hiper con el modelo Planet o la entrada en horeca. O en el giro comercial de Mercadona, ajustando costes y ganando posicionamiento con una excelente estrategia de publicidad boca a boca y un eficaz manejo de las redes sociales sin estar oficialmente en ellas.
No menos innovadores llegan conceptos de fuera. Los primeros Pop Up Store, físicos o virtuales, con Toys R Us adaptando el formato a la inamovible estacionalidad de los juguetes, o Imaginarium sumando oferta y servicios, a pie de calle y en localizaciones premium. Sin hablar de los otros canales, donde e-commerce y social shopping marcan las nuevas vías de la publicidad y el marketing y del renovado protagonismo del punto de venta. Con Madrid y Barcelona aglutinando la entrada de operadores multicolor, todos al amparo de una mayor y más económica oferta de locales comerciales convertidos en productos refugio para la inversión.
El retail no se para. Los que nos siguen hace tiempo conocen la apuesta de esta publicación, y de quién esto escribe, por los valores de futuro. Apostemos una vez más. Por un feliz, próspero e innovador 2011. Que la
r-evolución, cuando llegue, nos encuentre trabajando.