¿QUÉ PASARÍA SI PIERDES TU MÓVIL?
Atención a las cifras. El 72% de los españoles ha perdido su móvil al menos una vez, exponiendo su contenido -que en el 39% de los casos es personal e íntimo– a la indiscreción de la mirada ajena. Y es que un 44% de los usuarios reconoce que utilizaría un teléfono sin la autorización de su propietario.
¿A quién no le ha pasado? La pérdida o hurto de un accesorio móvil va más allá de la falta de disposición pasajera de las soluciones que aporta. Siendo muchas, casi todo lo imaginable o no en el día a día salvo en el caso del smartphone su fin inicial, hablar por teléfono.
Un hecho tan común, saca a la luz la escasa protección de los datos personales acumulados en los accesorios móviles por parte de los usuarios ponen en evidencia la distinta importancia que dan al acceso a su información por parte de terceros y la poca cautela con la que ellos la salvaguardan.
Norton by Symantec ha presentado datos de una investigación propia que reflejan una realidad preocupante sobre la protección de la información en dispositivos móviles. Después de entrevistar a más de 3.000 usuarios en tres países, Francia, Italia y España, sus conclusiones revelan que los propietarios de smartphones o tablets están lejos de hacer un uso seguro de los mismos.
La calle y el transporte público son los lugares en los que la pérdida es más habitual en los tres mercados analizados, mientras que los baños y aseos públicos ocupan el tercer puesto (1 de cada 6 respuestas). No obstante, en España, el robo es bastante frecuente y se apunta como el cuarto motivo.
Por lo que respecta a la información personal, su pérdida supone un problema casi más grave que el extravío del propio dispositivo. En el sur de Europa, los consumidores utilizan sus dispositivos para leer correos electrónicos y para participar en redes sociales. Para el 76% de los españoles, consultar el correo personal en el teléfono o tablet se ha convertido en una rutina diaria, mientras que el 59% también lee los e-mails del trabajo. Además, uno de cada seis realiza compras a través de sus dispositivos, al menos una vez por semana y uno de cada cinco almacena en ellos sus datos bancarios personales.
POCA PROTECCIÓN PERSONAL
En España, el 39% guarda las claves de acceso de sus redes sociales y una proporción similar (36%) archiva datos de registro de su correo electrónico. De la misma manera, un 39% tiene en su smartphone fotos y vídeos íntimos o comprometidos. Un grave perjuicio, si el móvil cae en manos de ese 44% dispuesto utilizar el dispositivo. Aún más, cuando el 20% de este porcentaje asegura que leería los mensajes y el 19% que vería las fotografías y los vídeos.
El estudio concluye que es necesaria una mayor educación sobre el uso seguro del móvil y advierte que “se aprecia una madurez creciente en este sentido”. De hecho, la mitad de los entrevistados considera la pérdida de sus datos móviles como un riesgo peligroso o probable y, por ello, ha introducido mejoras en la gestión de sus dispositivos, tales como compartir menos información. Además, uno de cada diez ha suscrito un seguro frente a la pérdida o robo de su móvil.
La protección de los datos confidenciales, otra de las grandes preocupaciones de los usuarios, ocupa el tercer puesto en el ranking de cuestiones a tener en cuenta para aumentar su nivel de protección, por detrás de los viajes y de los bienes materiales.
