PPR se lanza a la compra de Puma

El mayor distribuidor no alimentario de Francia ha dado un importante paso en su propósito de reforzar su división de marcas de lujo. El pasado 10 de abril, la compañía de la familia Pinault anunciaba la compra del 27% de la firma alemana Puma, al tiempo que lanzaba una oferta por el resto de la empresa. PPR ofrecía 330 euros en efectivo por cada una de las acciones pertenecientes a los hermanos Günter y Daniela Herz, lo que representa una prima del 16% respecto al cierre del pasado 4 de abril, el día anterior a que surgieran rumores acerca de la operación que luego se materializó.

PPR ofrece el mismo precio por cada título restante de la empresa en una transacción que valora Puma en 5.300 millones de euros.

El mismo día en que se hacía pública la operación, los títulos de la empresa alemana subían un 11% en la bolsa de Fráncfort, hasta alcanzar el record de 348,80 euros. Un precio que supera la oferta de PPR, lo que podría forzar a la compañía francesa a mejorar las condiciones de la compra. El consejero delegado de Puma, Jochen Zeitz, en una entrevista con la televisión alemana ZDF, comentó el pasado 11 de abril que aunque el precio ofrecido por PPR es justo no descarta una posible mejora. Asimismo, Zeitz añadió que existe la posibilidad de que Nike, el mayor fabricante mundial de ropa deportiva, haga una contraoferta por Puma. Sin embargo, precisó que es una eventualidad poco probable.

Por su parte, los accionistas de PPR han reaccionado positivamente a la noticia. El 10 de abril, los títulos de la empresa de los Pinault subieron un 2,5%, hasta 132,10 euros, en el mercado de París. PPR ha insistido en que no mejorará su oferta por Puma, recordando que es el precio al que la familia Herz ha aceptado vender su participación y que valora adecuadamente la empresa. Puma, diseñadora del uniforme de la selección italiana de fútbol, actual campeona del mundo, vende sus productos en 80 países.

Lujo
Para PPR, la incorporación de Puma supone reforzar su muy rentable división de lujo (Gucci, Bottega Veneta, Yves Saint Laurent, YSL Beauté) frente al retail (Fnac, Conforama, CFAO, Redcats), cuyas tasas de crecimiento son mucho más modestas. Puma ha cuadruplicado sus ventas en los últimos cinco años gracias a la reorientación del negocio. La empresa, que a principios de los años noventa estaba a punto de sucumbir a los gigantes Nike y Adidas, encontró su camino en el diseño de prendas de vestir con un aire deportivo, en muchos casos realizadas por diseñadores famosos. El artífice del cambio fue el propio Zeitz, que cuando, en 1993, se hizo con las riendas de la empresa tenía 30 años de edad.

Otra de las claves del éxito de Puma proviene del traslado de buena parte de su producción al Sudeste de Asia, con el consiguiente ahorro de costes. Además, Zeitz ha puesto en marcha una red de tiendas propias para vender los artículos de la marca. A finales de 2006, Puma contaba con 550 establecimientos, frente a los 42 existentes seis años antes.

Siguiendo la senda abierta por Puma, las grandes firmas de ropa deportiva vienen incluyendo en su catálogo artículos realizados por diseñadores famosos. Stella McCartney o Alexander McQueen, cuyas empresas se engloban en PPR, trabajan para Puma y Adidas.

Los dos grandes fabricantes alemanes de material deportivo tienen un origen común. Ambos fueron creados en 1940 después de que los hermanos Adolf y Rudolf Dassler rompieran su relación por sus discrepancias acerca de la estrategia que debía seguir la empresa de calzado que habían fundado en 1924. “Adi” Dassler dio su nombre a su mitad de la compañía, mientras que su hermano optó por el felino que caracteriza su marca. La dos empresas tienen sede en Herzogenaurach, una localidad situada al norte de Nuremberg.