El origen y los ingredientes del producto, influyen la elección del consumidor
El 21,2% de los españoles considera imprescindible conocer la procedencia de los ingredientes de los productos. La tercera parte de la población prefiere consumir aquellos de origen nacional y consideran primordial la información nutricional que se incluye en las etiquetas.
Los españoles cada vez prestan más interesados a la alimentación y a la calidad de los alimentos. Son las conclusiones que se han extraído de “Buceando en las tendencias alimentarias de los españoles”, un estudio realizado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, donde se muestran los hábitos de compra alimentaria y estilo de vida de los españoles.
La falta de tiempo influye en los hábitos alimenticios. Ha aumentado quienes comen fuera de casa un 1,4%, pero también quienes aprovechan el tiempo libre para cocinan. El 32,2% de los españoles cocinan por placer, 6,5 puntos más que en 2015. Esta tendencia es un reflejo del deseo por alimentarse de forma saludable. Para asegurar la calidad de los ingredientes, presentan una mayor atención en su origen. EL 21,2% considera imprescindible conocer cómo se han producido y la información nutricional de los productos que consumen.
Los productos españoles son los favoritos, el 46,8 prefieren gastarse más si con ello consiguen productos nacionales. El porcentaje aumenta sobre la región, el 54,7% gasta más si con ello se aseguran consumir alimentos de su tierra de origen. A la hora de escoger un producto también influye la información nutricional, la cantidad de azúcares, el tipo de aceite o grasa, las grasas saturadas o los aditivos son las características que más influyen a la hora de elegir.
La cantidad de alimentos que se desperdician varia en relación a la edad. Los más jóvenes son los que más alimentos derrochan, aquellos entre los 18 y 24 años desechan 14,5% más que quienes rondan los 60 y 65 años. El estilo de vida influye, quienes suelen comer fuera de casa tienden a malgastar un 16% más.
Las diferentes generaciones también presentan diferencias a la hora de apostar por el comercio online u offline. La compra por Internet ha aumentado en los grandes almacenes, supermercados o hipermercados, sumando 2,3 puntos más que en 2017. Los más jóvenes, la generación Z (9 y 25 años) consumen de forma online 5,9 puntos más que los baby boomers (de 51 a 70 años), 5,5 más que la generación X (entre 39 y 50 años) y superan en 1,2 puntos a los Millennials (26 y 38 años).
En un futuro, la generación más joven es la que más confía en aumentar o seguir comprando online. Quienes apuestan por comprar en los establecimientos comerciales admiten que prefieren poder escoger ellos los productos y verlos antes de elegirlos, sobre todo los alimentos perecederos.
Internet también juega un papel importante en la alimentación ya que son sus portales los principales medios en los que se consulta la información. EL 50,4% tienen los blogs y los foros como principal fuente, por delante de las redes sociales (47,1%), los nutricionistas (42%) o los médicos (38,8%). Incluso, con el aumento de la afición por la cocina las apps de cocina sigue descargándose al mismo ritmo que en 2015 y ha aumentado el número de las de salud en 1,3.