No hay indicio de reactivación de las compras
A corto plazo, el consumo de las familias no parece que vaya a mejorar. Al menos la mayoría de los hogares mantienen una posición negativa en su intención de compras, ya sean de envergadura o cotidianas. Se observa una ligera mejoría estival en la reactivación del consumo de productos y servicios relacionados con el verano, tales como ocio, viajes, ropa o complementos. Son datos del mes de julio del informe ‘Perspectivas del Consumo. Índice de Comportamiento del Consumidor” elaborado por MillwardBrown.
El estudio aborda la percepción que los consumidores en cuanto a la influencia de la crisis en la economía familiar y concluye que la incidencia es cada vez mayor y más negativa. El 55,6% de los entrevistados así lo cree, frente al 16,8% que piensa que le afecta poco o nada.
En la valoración del momento para realizar compras, aunque hay una ligera mejoría, se mantiene la tónica negativa, lo que impide pensar en una reactivación del consumo a corto plazo. Sin embargo, se puede pensar que con la llegada del período estival se produzca un ligero incremento en el consumo de ocio, viajes, ropa o complementos, impulsado por el turismo.
En cuanto a las opiniones sobre la coyuntura económica, el estudio concluye que las expectativas sobre la creación de empleo son positivas, ya que los encuestados creen que el desempleo descenderá, quizás motivado por las previsiones del sector turístico y las contrataciones efectivas que se están produciendo.
Un hecho especialmente relevante en el mes de junio es la percepción de que la crisis está afectando mucho a la situación económica de los hogares. Más de la mitad de los entrevistados opina que la crisis está afectando cada vez más a sus economías domésticas. A este respecto, manifiestan percibir descensos en sus ingresos, inseguridad en el empleo, agobios con las hipotecas, incrementos de precios en los productos básicos e incertidumbre ante el futuro en cuanto a su estabilidad financiera.