Mango, China y Rusia en punto de mira
Dos mercados emergentes y con gran potencial, China y Rusia, se han colocado en el punto de mira de la expansión internacional de Mango. El país asiático, principal fabricante del grupo catalán (entre 40% y 50% de la producción), va camino de convertirse en eje prioritario de su inversión exterior. La empresa de moda y complementos, ha previsto abrir alcanzar un total de 1.000 tiendas en China, en un plazo no mayor de cinco o seis años. Con ello, multiplicaría por cinco la red actual, situada en 187 puntos de ventas.
El negocio chino, que ahora representa el 4% de la facturación total, alcanzaría casi un cuarto de las ventas consolidadas (20%). Una posición, que desbancaría al mercado doméstico, que en estos momentos supone el 18% de los ingresos, a través de los 309 establecimientos abiertos en diferentes puntos del territorio nacional.
La producción de Mango no está sólo en manos chinas. Marruecos representa entre el 15% y el 20% y otros países como Vietnam, Corea, Europa del Este y Turquía también participan en este proceso.
Por lo que respecta a Rusia, los planes de la firma pasan por implantar una tercera parte de las unidades que se abrirán en China Un crecimiento mucho más moderado en espacio y tiempo, que no afectará la buena evolución de las 96 locales que Mango explota en la actualidad en el mercado moscovita.
Este año Mango pondrá en marcha entre 300 y 400 locales, frente a las más de 600 inauguraciones realizadas en 2011.Serán tiendas propias a pie de calle. La inversión rondará los 140 millones de euros e incluirá reformas de centros y mejoras en sistemas logísticos y de información-
La compañía, con 2.400 establecimientos en 107 países de todo el mundo, facturó 1.408 millones de euros en el último ejercicio.