M-commerce, mobile marketing y tecnologías omnicanal
(Por Elena Lostalé)
Pensar en comercio electrónico significa ya pensar en mobile commerce. Según el Observatorio de Cetelem, el 63% de los españoles compra a través del móvil, y se prevé que esta cifra vaya en aumento. Del lado del vendedor, un 25% de los e-commerce españoles realiza más de la mitad de sus ventas vía móvil, de acuerdo con datos del VI Estudio “Evolución y perspectivas de e-commerce para 2019”, que realizan conjuntamente la agencia de marketing digital Kanlli y la publicación especializada D/A Retail.
De este informe se desprende, además, que el 67% de los e-commerce en nuestro país disponen de una app nativa y el 21% ha adoptado el m-payment en tienda física, como parte de su estrategia omnicanal.
Con el móvil como primer dispositivo de acceso a Internet, no hay duda de que los consumidores llevan la tienda en el bolsillo. De sobra es sabido que no tener la web adaptada a móvil es ya impensable para los comercios digitales, y que contar con una aplicación ayuda más a la venta, pues favorece la experiencia de usuario y, además, ofrece más confianza (un 64% de compradores en móvil lo prefiere). Hay, además, que cuidar aspectos como la velocidad de carga y la usabilidad o simplificar al máximo y eliminar funcionalidades superfluas.
Precisamente aplicaciones de marketplaces como Amazon o eBay han favorecido mucho el m-commerce. Por ello, los vendedores digitales deben valorar seriamente tener presencia en estos grandes supermercados online, no solo ya pensando en mobile commerce, sino en el voice commerce que está empezando a despegar. Aunque tener presencia no es suficiente: si hablamos de Amazon, por ejemplo, es necesario llevar a cabo una adecuada labor de SEO pensando no sólo en su plataforma, sino en la propia Alexa. Atentos, porque Google lleva meses dando firmes pasos en dirección a un e-commerce propio, de carácter integrado en todos sus servicios.
Por otro lado, la venta móvil no implica únicamente a la tienda online: gran parte de las estrategias de marketing también deberían idearse con foco en el móvil, atendiendo a aspectos como los micro momentos o las necesidades on the go. Así, aspectos como conseguir un impacto rápido o utilizar adecuadamente la localización, respectivamente, nos ayudarán a incrementar las posibilidades de venta, tanto a través del propio móvil como en el establecimiento físico.
El social commerce también guarda una gran relación con el mobile commerce, ya que los usuarios acceden a las redes sociales, mayormente, a través de su móvil. Plantear campañas de social ads es buena idea, pues cada vez son más los usuarios que realizan compras en medios como Facebook o Instagram. Eso sí, tendremos que asegurarnos de que la web a la que dirigimos el tráfico esté perfectamente optimizada para móvil, ofrezca una buena UX y favorezca la conversión.
Por otra parte, la plena adopción de los smartphones y el desarrollo del m-commerce han propiciado que la estrategia omnicanal ya no sea una opción, sino una necesidad. En ese sentido, se torna crucial la unión entre el punto de venta y el teléfono móvil (de contar con tienda offline), ya que puede ser decisiva en el proceso de compra. Gran parte de las tecnologías omnicanal necesitan del teléfono móvil (apps, m-payment, social wi-fi, iBeacons…). En este caso el móvil no necesariamente funciona como dispositivo desde el que se realiza la compra, sino que puede, simplemente, suponer un apoyo a la compra en el establecimiento físico.
(Elena Lostalé, es marcom manager en Kanlli)
Si deseas conocer en profundidad las tecnologías omnicanal, visita el blog de Kanlli.