Lecturas en Retail: Retailers en familia. ¿Quién releva al relevo?

“De forma muy natural” en palabras de Pablo Isla, el sucesor, se ha producido el relevo de Amancio Ortega en Inditex. Isidoro Álvarez dará el paso en El Corte Inglés previsiblemente en fecha próxima. Juan Roig, con aún largo recorrido por edad, tendrá que hacerlo en una década en Mercadona. Tres grandes empresas familiares en origen. La sucesión se trabaja durante largo tiempo, incluido el relevo del relevo. No hay dos casos iguales, ni fórmulas mágicas a imitar. Si muchos errores a evitar.

“De forma muy natural” en palabras de Pablo Isla, el sucesor, se producia hace tres años el relevo de Amancio Ortega en Inditex. Isidoro Álvarez es sustituido por su sobrino Dimas Gimeno. Juan Roig, con aún largo recorrido por edad, tendrá que hacerlo en una década en Mercadona. Tres grandes empresas familiares en origen. La sucesión se trabaja durante largo tiempo, incluido el relevo del relevo. No hay dos casos iguales, ni fórmulas mágicas a imitar. Si muchos errores a evitar.

La gran mayoría de las empresas familiares que existen en España desparecen con su creador. Siete de cada diez no supera la primera ronda sucesoria. Apenas quince de cada cien llegan a la segunda. Caso aparte Artesanos Sanmarti, en Caldes de Montbui, la más antigua de todas. Tres siglos desde que en 1700, Isidre Sanmartí probará a convertir el trigo en harina, mezclarlo con agua caliente y dar forma a las primeras pastas alimentarias.

Por encima de todo, la empresa familiar nace con voluntad de continuidad. Familiar y con continuidad en El Corte Inglés, Inditex, Mercadona, Mango, Froiz. O Leche Pascual, Helios, Chocolates Valor, Lladró, Calvo, Hijos de Rivera, Codorniú, Siro, Borges o los hoteles Barceló. Ejemplos con variadas trayectorias y diferente recorrido sucesorio. Unos, caso de Barceló Hotels, eligen la gestión dual, con dos copresidentes. Otros, tal que en Lladró, se decantan con externalizar la gestión. Los más, con integrar a la siguiente generación preparándoles antes para ello.

“La familia es una cosa, la empresa es otra” solía decir Ramón Areces fundador de El Corte Inglés. Así actuaría a la hora de elegir el sucesor. Entre otros muchos de la misma sangre, formarle, inculcarle los valores de la firma con visión de futuro en la figura de Isidoro Álvarez para dar paso a la tercera generación. Álvarez ha seguido en esta segunda etapa pasos paralelos. Con estilo propio. Mucho antes del retiro incorporaba altos ejecutivos no familiares a la dirección del grupo. José María Folache, José Ignacio Caballero, Borja de la Cierva, Diego Copado. Llegados desde Carrefour, de Coca Cola, de Inditex. Con Dimas Gimeno Álvarez, sobrino discreto del presidente, al que se le asigna un protagonismo especial en el futuro. Garantizado el relevo y el equipo que le acompañará.

En Inditex, Amancio Ortega formó durante años a su hija Marta. 27 años. Demasiado joven, mejor en una segunda posición por el momento. Un externo para la presidencia ¿por qué no? La exitosa gestión de Pablo Isla en solo un quinquenio despejaba la duda. Sin problemas de relevos segundos. Un solo vicepresidente, Carlos Espinosa de los Monteros y el propio Ortega “participando activamente en la vida de la compañía». Con ellos, Flora Pérez Marcote en representación de Gartler. A los consejeros veteranos, como Juan Manuel Urgoiti, presidente del Banco Gallego y vicepresidente de Acciona. Francisco Luzón López, vicepresidente ejecutivo para América Latina del Banco Santander e Irene R. Miller consejera independiente desde 2001 llegada desde Rothschild Inc. y Morgan Stanley & Co , se suman dos recién llegados, Emilio Saracho y Nils S. Andersen, elegidos en la última Junta. Saracho es responsable de las actividades de Investment Banking de J. P. Morgan para Europa, Oriente Medio y África. Andersen es socio y consejero delegado del Grupo A. P. Moller-Maersk. Una vez más, el negocio en Inditex “atado y bien atado”

Caso opuesto en Juan Roig, presidente de Mercadona. No cree en los consejeros independientes. “Los consejos, con dinero” dice. Y así lo practica. Junto a él, en la vicepresidencia, Hortensia Herrero, su mujer, a quién conoció estudiando Económicas. Su hermano, Fernando Roig, propietario del 11% de la cadena a la par de máximo accionista de Pamesa y del Villarreal Club de Fútbol. Y sus hijas, cuatro. Dos de ellas, Carolina y Juana, licenciadas en Económicas y ADE respectivamente, trabajando en la empresa. Las otras dos, Amparo, arquitecta con Estudio propio y Hortensia, secretaria general de Edem, actuando como consejeras. Solo Rafael Gómez es miembro del consejo ajeno a la familia. Con derecho propio, el 7 % de las acciones, desde 1998 en que Mercadona se hiciera con Almacenes Gómez Serrano, única operación de compraventa en la historia del líder valenciano.

Tres ejemplos distintos de empresas ganadoras. Muchos libros muestran estos y otros casos, de grandes éxitos y sonados fracasos. Pueden elegir “Amancio Ortega, de cero a Zara” de Jesús Salgado y Xabier R. Blanco, si es que aún les queda algo por descubrir del imperio y su creador que no sea la pócima mágica que solo ellos guardan. Pueden, más allá, tener acceso a la historia familiar de Ikea, Michelin, New York Times o Estée Lauder en “Gestionar a largo plazo. La ventaja competitiva de las mayores empresas familiares” Un análisis de Danny Miller e Isabelle Le Breton-Miller del éxito resumido en “las cuatro Cs”, Comando, Continuidad, Comunidad y Conexión. Para lectura relajada, no duden del tono epistolario en «Construyendo el legado de las familias empresarias. Cartas de propietarios de empresas familiares a sus sucesores» de Gordon Adler.

O simplemente quédense, en tono biográfico, con la historia de la familia Godó. “Los Godó. Los últimos 125 años de Barcelona” es el título. La periodista y filóloga Vis Molina, la autora. Un retrato familiar, empresarial y también de la alta sociedad catalana a través de cuatro generaciones entre tres siglos desde que en 1881 los hermanos Carlos y Bartolomé Godó fundaran el diario La Vanguardia.

Y sobretodo “sea curioso y no se ponga furioso” No se a quién se lo escuché o leí. Resume en dos palabras el mejor consejo para la empresa familiar. Sea curioso. No piense que solo lo suyo y en familia es lo mejor. Ni que en el caso de que así fuera en su momento, los momentos, los suyos, no son como los de los otros, que acaban siendo cosa del pasado.Vea, lea, conozca, investigue, pruebe. Abra los ojos y las puertas al futuro, por mucho que en su pasado estén esas ideas tan brillantes que le han llevado al presente en tan buen lugar de reconocimiento. Añada el “no se ponga furioso” Mantenga como norma la prudencia y tranquilidad necesarias, a veces durante años, para ver con claridad aquello que el entorno dificulta. Propiedad, familia y empresa. A cada cual su sitio, cada uno tiene su tarea. Sin confundir efectividad con afectividad. Lo que es del hogar, en el hogar debe quedar.

adavara@distribucionactualidad.com

(Publicado en Distribución Actualidad Agosto 2011)