Las cápsulas de café de Sara Lee conquistan el mercado español
Más de 20 millones de cápsulas de café (compatibles con las máquinas de Nespresso), vendidas en España, en tan sólo dos meses, han otorgado a la marca Marcilla, propiedad de la multinacional Sara Lee, una cuota cercana el 5% (4,7%) en el segmento de café tostado. Un parte significativa de un segmento que supone el 16% de todo el mercado y que mueve alrededor de 70 millones de euros anuales en nuestro país.
Motivos no le faltan: precio y disponibilidad. Son un 14% más baratas que las monodosis originales de la filial de Nestlé. Además, son accesibles en más 5.000 puntos de venta (no exclusivamente en boutiques), en España, el país, donde han recibido una mejor acogida, nada menos que seis millones de pedidos en su pistoletazo de salida, pese a que su lanzamiento se había realizado antes en Francia y Holanda.
El ascenso meteórico de Marcilla L’arôme EspressO, que ha triplicado su volumen, desde su presentación el pasado abril, augura un “competidor sin competencia” para el creador del sistema, Nespresso. La marca suiza se está viendo atacada por diversos frentes, entre los que no falta la gran distribución, que ha entrado de lleno en el negocio. Mercadona ha incorporado en los lineales el café en cápsulas compatibles con Nespresso, sumándose a otras enseñas como Consum, Carrefour y El Corte Inglés, Alcampo, Eroski, Caprabo, Condis, Bon Preu, Sorli o Schlecker, entre otros, que ya ofrecen las cápsulas fabricadas por Sara Lee.
No obstante, la baza de Marcilla es el coste de su producto, que se vende en España a un precio recomendado de 2,99 euros el paquete de diez cápsulas de café, en cualquiera de seis variedades: Satinato, Delizioso, Decaffeinato, Splendente, Sontuoso y Forza, cada una con diferentes niveles de intensidad, cuerpo y sabor. Todas ellas contienen sólo café 100% arábica, cultivado y cosechado de forma social y medioambientalmente. Según los datos de la compañía, las variedades más populares son Splendente y Sontuoso.
Entre tanta cápsula, floreciendo en el mercado, Nestlé no ha tomado ninguna medida legal en España, como se rumoreó en un principio, cuando se planteó un posible caso de competencia ilegal. No sucedió así en Francia, donde la multinacional suiza interpuso una demanda, reclamando que se impidiera la venta. En el mercado nacional, Sara Lee diferencia su producto y lo protege por una patente industrial. Por ello, en nuestro país no ha se ha producido ningún contencioso, al menos de momento..
Nespresso capta la mitad de un negocio en España y no está dispuesto a perder consumidores. Fue la primera en llegar y tiene miles de adeptos, aunque para algunos el coste de sus cápsulas es demasiado elevado.
Al margen de la competencia, hay algo en lo que Nestlé y Sara Lee están de acuerdo, asegurar la producción de café sostenible en los próximos años. La primeraza a invertir cerca de 413 millones de euros hasta 2020 para fomentar la agricultura responsable y optimizar su cadena de suministro. Por su parte, la segunda, se ha comprometido a triplicar en cinco años la cantidad de café certificado, con el sello UTZ Certified, que beneficia a más de 95.000 agricultores en todo el mundo.