LA TIENDA OMNICHANNEL, GANADORA EN 2016
Tienda. Con mayúsculas, sea física o virtual. Ambas, brick & mortar, ecommerce y más allá de la multicanalidad, en todo canal. La tienda será la ganadora de 2016, siempre que tenga en cuenta y se predisponga a adaptar las tendencias y en paralelo las herramientas tecnológicas, que le permitan responder a las necesidades del cliente que en el entorno de la ya real nueva Economía Digital se imponen.
Tienda física y tienda electrónica, canales sociales o móviles junto a otros conceptos que llegan deben fusionarse bajo un concepto omnichannel. Lejos de la opinión de la tienda- física- está muerta en el futuro movilidad, cloud, datos y medios de comunicación sociales de integrarán plenamente hacia una total satisfacción del cliente.
Lo afirma Software AG que adelanta las tendencias disruptivas que van a comenzar a imponerse en el año que llega
- Menor número de nuevos puntos de venta físicos nuevos por parte de los retailers brick & mortar
- Personalización como enfoque diferenciador hacia el cliente aprovechando la información interna y externa que las herramientas y canales pueden proporcionar.
- Precio dinámico y en tiempo real
- Gestión global y mayor control de los procesos en todos los canales.
- Análisis predictivos que permitan conocer lo que los clientes van a querer y cuándo
- Internet de las cosas y revolución de la tienda del futuro hacia el cliente
- Tecnología punta. Realidad aumentada, como Microsoft’s Hololens, beacons y sistemas de reconocimiento de voz o visuales permitirán la interactuación con los clientes que conseguirán la deseada experiencia de compra.
- Monotorización en tiempo real de cara a facilitar y automatizar los procesos de gestión ofreciendo a los equipos de tienda la capacidad de respuesta dinámica.
- Comprame ahora. “Buy buttons” que se pueden encontrar en redes sociales como Twitter o en plataformas como Amazon que se traducen en ingresos mayores. Para ello, serán necesarias inversiones en tecnología para garantizar el funcionamiento correcto del control global de la cadena.
- Visibilidad y control total del inventario que permita mantener al cliente puntualmente informado de las existencias en todo momento. De nuevo, la inversión necesaria en herramientas tecnológicas.