La moda británica y estadounidense se prepara para la recesión
Los mercados de moda británico y estadounidense se atrincheran para sobrevivir en medio de la crisis. Nuevas estrategias surgen a ambos lados del Atlántico con el objetivo de ayudar a la industria a encarar los retos actuales.
Así se desprende del último informe sobre el sector en el Reino Unido y en Estados Unidos., (Fashion Reports), que acaba de publicar WGSN, compañía líder en investigación, análisis y predicción en moda y diseño.
De acuerdo con sus conclusiones, en ambos territorios, los diseñadores están potenciando sus puntos fuertes. Los británicos se dirigen hacia la creatividad, mientras que los americanos fomentan su experiencia comercial, estrechando márgenes y reduciendo costes.
El capital privado se presenta como factor clave de financiación en las empresas del Reino Unido, mientras que en Estados Unidos se buscan inversores entre los grandes fabricantes asiáticos y los gigantes del retail.
WGSN señala que las cadenas británicas se mueven con una velocidad mayor que las norteamericanas, en lo que se refiere a los plazos medios de entrega y subraya que la moda continuará siendo una industria de importación, impulsada por China, pero también por India y Vietnam.
Por otra parte, según el estudio, los retailers británicos, (sobre todo los de precios bajos), se encuentran en mejor posición que sus competidores para afrontar la crisis, aunque el empleo seguirá cayendo en ambos mercados.
En este escenario cambiante, la responsabilidad social será un factor a tener en cuenta por los consumidores, más conscientes que nunca de las prácticas de los fabricantes.
Por lo que respecta a tendencias, la primavera-verano 2009 traerá a los dos mercados el punto circular gris jaspeado; los vestidos inspirados en la ropa de trabajo; chaquetas más amplias y monos.