José María Bonmatí, pide “mantener la rebaja del IVA hasta que la inflación esté controlada”
El director general de Aecoc considera la bajada del IVA una medida adecuada contra la inflación.
Así lo ha manifestado José María Bonmatí en la inauguración del 25 Congreso de Frutas y Hortalizas que se está celebrando en el Palacio de Congresos de Valencia, con la asistencia de más de 600 productores, distribuidores y asociaciones del sector.
Bonmatí valora la rebaja del IVA para algunos alimentos básicos como “adecuada, ya que permite a las rentas más bajas acceder a productos saludables, como frutas y hortalizas, porque estos hogares son los que mayor parte del presupuesto destinan a la alimentación”.
Sobre el actual contexto de incremento de precios, Bonmatí recordó que las empresas “están haciendo esfuerzos para garantizar que los consumidores puedan comprar los productos que necesitan a los mejores precios, ya sea reduciendo sus márgenes o buscando fórmulas para ser más competitivas”. También hizo referencia a los costes regulatorios de las medidas aprobadas por la administración, y reclamó “garantizar la seguridad jurídica y que los costes incorporados sirvan para conseguir los objetivos de la regulación, que en casos como el del impuesto a los plásticos creemos que no se cumple”.
Caída del consumo
NIQ presentaba en el Congreso los datos sectoriales, que muestran un descenso amortiguado en el consumo de frutas y hortalizas en 2023.
Entre enero y abril, el volumen de venta de frutas y verduras cayó un 3,6%, frente al descenso del 4,3% que se registró en 2022, en un escenario marcadamente inflacionista.
En el caso de las frutas, la caída en los volúmenes de venta ha pasado de un 5,3% en 2022 a un 2,8% en estos primeros cuatro meses del año, mientras que la evolución del consumo de hortalizas ha sido de un 3,1% a un 2,8% en el mismo periodo.
El informe de NIQ muestra que las frutas frescas más consumidas en España son las naranjas (18,1% del volumen total), los plátanos (16,1%), las manzanas (10,3%) y la sandía (7,6%). Estos cuatro alimentos suponen más del 50% del consumo de fruta en nuestro país.
Los datos de la consultora también evidencian la influencia del incremento de precio sobre el consumo de estos productos. El caso más ilustrativo es el de la sandía, que en los últimos 12 meses llegó a registrar aumentos de valor del 72%, lo que se tradujo en un descenso de un 22% en el volumen de compra. En cambio, en los primeros meses del año, las subidas de precio de esta fruta han sido del 7% y su consumo ha subido un 89%. El consultor de NIQ, José Ramón Díaz, ha matizado que, aunque la evolución es positiva, los datos representan aún un porcentaje menor del consumo anual de esta fruta. Del mismo modo, el precio de los plátanos ha bajado un 10,5% en este arranque de año, mientras que su consumo ha crecido un 6,8%.
Nuevos momentos de consumo
El congreso también ha contado con la visión de productores y distribuidores del sector, que han valorado la evolución del consumo de frutas y hortalizas. El director de ventas de Florette, Fermín Aldaz, y el director de frutería de Carrefour, Víctor José Ayllón, han coincidido en que los formatos de ahorro, a granel y la marca de la distribución está ganando relevancia en un contexto en el que el consumidor prioriza el ahorro.
En el análisis de las palancas de crecimiento del sector, Aldaz reclamado buscar nuevos momentos de consumo, como puede ser el desayuno. “Las frutas e incluso las verduras deben estar presentes en estos momentos en los que antes no aparecían”.
Ayllón, por su parte, ha valorado el crecimiento de la sostenibilidad en las prioridades del consumidor. “Cuando hablamos de sostenibilidad pensamos en envases, pero también hay cuestiones como el uso racional del agua para la producción de alimentos o las condiciones sociales de los trabajadores del sector, y debemos poner en valor a los productos y marcas que trabajan bien estos ejes”.
La venganza del campo
Con la globalización y la gran eficiencia de la cadena, se llegó al mínimo de precios de los alimentos que dejaron de ser una preocupación para los consumidores” (Manuel Pimentel)
La primera jornada del congreso contó con la intervención del exministro de trabajo, Manuel Pimentel, que habló de “la venganza del campo”, en referencia a la pérdida de valor de los alimentos para la sociedad urbana que se ha traducido en un abandono de las producciones agrarias y, en consecuencia, un notable incremento de los precios.
En este contexto, Pimentel expuso que “las normas actuales no van dirigidas a incrementar la producción de los alimentos, sino a poner trabas” y reclamó a las empresas del sector “sentirse orgullosas de que proveéis alimentos a la sociedad, que nos debe valorar por eso”.
Pimentel consideró que “el incremento de precios de los alimentos es un problema, porque afecta a las familias, pero no podemos responsabilizar al sector productivo ni a la distribución, porque estaríamos pegándonos un tiro en el pie”. El exministro de trabajo concluyó valorando que “si seguimos con normas que aplasten la producción subirán los precios y acabaremos teniendo problemas de escasez”.