INFUSIONES Y TÉ, MARGEN DE CRECIMIENTO

Los nuevos hábitos de consumo, unidos la proliferación de tea shops y establecimientos hosteleros dedicados a la degustación de infusiones y distintas variedades de té están haciendo crecer la demanda de este tipo de productos.

La propiedades relajantes y beneficiosas de las infusiones, unidas al poder estimulante del té, han favorecido el consumo. No obstante, en España, la ingesta per cápita de infusiones apenas roza el kilo anual, cuando la de café alcanza casi cuatro.

Infusiones, mayor dinamismo
De acuerdo con los datos facilitados por IRI, en el último año el mercado de infusiones y té alcanzó de forma conjunta un volumen superior a los 3,6 millones de kilos y un valor de 94,5 millones de euros, lo que representó un aumento significativo cercano al 6% en volumen y un ligero repunte en ventas (0,4%) .

Habitualmente consumimos más infusiones que té, casi el doble. Los datos de IRI apuntan un total de 2,2 millones de kilos de infusiones, en el último año, por un valor de 62,5 millones de euros, lo que representa un aumento del 4,7% en volumen y del 3,4% en valor.

La bajada de las ventas en las principales variedades (manzanilla, tila y poleo menta) ha sido generalizada. La manzanilla sigue liderando el segmento, con más de un cuarto del total (29,7% en volumen y 28,7% en valor), lo que no le ha impedido retroceder más de tres puntos porcentuales en el total comercializado y uno en valor. Y eso, a pesar de ser la única infusión que se produce en nuestro país, permitiendo el autoabastecimiento del mercado.

Le siguen el poleo, la menta y la tila , con casi la misma participación en valor (más del 10%) y acusada tendencia a la baja, mientras que, por el contrario, en el resto de especialidades la cuota ha subido.

Conviene destacar el avance de las infusiones orgánicas, todavía con cifras poco relevantes en el conjunto , pero ganando terreno en determinadas especialidades, como la hierba mate, que ha incrementado su demanda entre los inmigrantes.

Té. Sin cambios
La evolución del té ha sido más dispar que las de las infusiones, como refleja el leve incremento (0,6%) experimentado en la demanda y la caída del 5% generada en la facturación (5%). En general, el mercado se ha comportado de forma estable, con ligeras oscilaciones a la baja en la categoría de té natural y al alza en el segmento de aromatizado.

Según datos del panel de alimentación de Mercasa “Alimentación en España 2009”, consumimos alrededor de 700.000 filtros de té y cerca de un millón y medio de filtros de otras infusiones. El té negro es el que registra la penetración más elevada, con el 60% del mercado, seguido por el té verde, con el 20%, y el aromatizado con el 8%.

Un dato a tener en cuenta es que la industria española del té está condicionada por las importaciones, ya que España es deficitaria en la producción del mismo. Sus principales proveedores proceden de Asia y África (India, China, Sri Lanka, Kenia e Indonesia).

MDD versus MDF
La marca del distribuidor controla el grueso del negocio de té e infusiones, con casi el 30% de las ventas y más del 40% del volumen. Sin embargo, no se puede obviar que esta es una parcela con gran notoriedad de marca, donde los líderes internacionales campean a sus anchas, sin que la MDD pueda superar sus ventas, a pesar de su alta penetración.

Douwe Egberts, propietaria de la marca Hornimans, opera en infusiones y té, capta más del 32% del total vendido y casi el 20% del consumido. Los principales escaños del mercado marquista tampoco escapan a la presencia de los líderes consolidados como Pompadour (Grupo Teekanne Pompadour); Nutrexpa (San Francisco); Compañía de Indias; Unilever (Lipton) y La Tisanería.