Hannaford, de la compra al gym

En los últimos años los supermercados han sabido ganar la partida al resto de canales de distribución y se han convertido en la opción preferida por los consumidores. En España concentran el 72% del gasto de los hogares, subiendo un 2% desde el año anterior. Sin embargo, en nuestro país ninguna cadena ha tenido la feliz idea de completar sus servicios con un gimnasio, como ha hecho la enseña norteamericana Hannaford.

Desde el pasado 18 de abril, uno de los establecimientos de la empresa, situado en Albany (Nueva York) ha puesto a disposición de sus clientes un gimnasio gratuito. Tenía espacio extra y en vez de ampliar almacén u oficinas, decidió que había una idea mejor. Bicicletas estáticas, cintas para correr, aparatos de ejercicios vasculares y hasta una sala para hacer “Zumba”, pueblan los 520 m2 que ocupa el Healthy Living Center (Centro de Vida Saludable), como se ha denominado el proyecto, que nace de la mano de Hannaford, la YMCA local y el plan de salud de Capital District Physicians, con el objetivo de combatir la obesidad y la diabetes.

De momento, esta es la única experiencia deportiva que existe en la red de Hannaford, que cuenta con 184 puntos de venta, pero sin duda, se trata de una implantación inédita y sin precedentes en el sector del retail alimentario.

Y es que, hasta ahora, los grandes supermercados contaban con parkings, que permiten a los clientes aparcar cómodamente sus vehículos para llevar luego la compra a casa; cafeterías, que sugieren una pausa en medio del ajetreo que supone llenar la cesta; guarderías que cuidaban de nuestros hijos mientras recorremos los lineales y gasolineras para repostar en el mismo lugar. Un gym es lo último, una idea sana y novedosa de la que por desgracia no disfrutamos todavía en España.