Foyles reta a Amazon books con tienda experiencias

Largas colas esperando la apertura de puertas. Un símbolo en su más de un siglo de existencia. Cientos de londinenses o viajeros expectantes ante los más de 200.000 títulos repartidos en seis kilómetros de estanterías y cuatro plantas. Es la apuesta por el formato libro en papel, un reto a Amazon books, de la cadena británica Foyles que acaba de abrir en el centro de Londres la mayor librería de Europa concebida como espacio de experiencias culturales.


En la nueva flagship, los libros y las vivencias que transmiten, son protagonistas. Por encima de su venta. La tienda de Foyles, en el mismo barrio que la pionera cien años atrás, propone un enorme espacio donde todo está pensado en torno a la generación de experiencias emocionales. Un innovador espacio donde leer, perderse en la tienda, descubrir libros o simplemente charlar y relacionarse con otros lectores o con los propios autores.

Foyles, clásica librería fundada en 1906 por los hermanos William y Gilbert Foyle, ha abandonado el local que ocupaba en Charing Cross Road desde 1929 para instalarse dentro de los muros de una antigua facultad de Arte del tamaño de 13 pistas de tenis. Un espacio muy grande, pero más sencillo, que busca la interacción entre los clientes. Con un diseño pensado para simular muchas tiendas pequeñas juntas o apariencia de librería universitaria, como lo describe Alex Lifschutz, arquitecto del proyecto. La tienda intensifica su carácter abierto, más experiencia que venta en si misma, con un auditorio para 200 personas, con música en directo, proyección de películas o sala de exposiciones de arte.

La centenaria historia de Foyles siempre estuvo ligada a una diferente visión del negocio, incluidas algunas acciones o títulos de obras un tanto oscuros. Un carácter personalista llevado al extremo por la segunda heredera y su excentricidad de fichar los libros por editoriales y no por autores lo que llevaría a los clientes a esperar largas colas y al doble trabajo, búsqueda y cobro, de los empleados.

La apertura de su flagship en el centro de Londres supone un reto frente a los libros digitales. Como reto fuera durante la II Guerra Mundial y ante la quema de libros aconsejada por Adolf Hitler, la propuesta de los hermanos Foyles de adquisición de su fondo editorial al propio dictador. Reto ahora hacia el gigante Amazon que Sam Husain, director de la tienda afronta con su mayor aval “si más de 200.000 personas acuden a nuestra tienda a buscar sus libros, es porque hay mucha gente que prefiere esta forma de comprar».

(Video The Guardian)