Farfetch, sin miedo al ecommerce del lujo. ¿Un diamante en bruto?
El 11 de octubre fue un día negro para Farfetch. Las acciones del marketplace de la moda del lujo cerraron con un precio de 20,31 dólares. El peor resultado desde que la compañía se estrenara en la Bolsa de Nueva York el pasado 21 de septiembre. El viernes la firma volvía a respirar tranquila. Sus acciones en el parqué neoyorquino ascendían un 14,72% y se colocaban así en los 23,30 dólares por acción.
No obstante, aún es pronto para que los inversores se lleven las manos a la cabeza. Y más si se tiene en cuenta el éxito que cosechó Farfetch en su début. Tal y como recuerda Practical Ecommerce, la compañía británica logró vender sus 44.2 millones de acciones y recaudar con su oferta pública de venta (OPV) 885 millones de dólares.
Al final de la sesión el marketplace obtenía una valoración de 6.200 millones de dólares, una cifra que supera el valor que consiguió Amazon en su primer día de bolsa – y que se situaba en los 660 millones de dólares-.
Desde la compañía aseguran que el dinero recaudado en la operación logrará financiar su crecimiento y las adquisiciones que la misma podría realizar en un futuro. Tal y como ya hizo en 2015, cuando compró una pequeña boutique británica llamada Browns.
¿Y por qué tanta expectación? Según los últimos datos ofrecidos por la empresa, en lo que llevamos de 2018 el marketplace ha facturado 598.3 millones de dólares en ventas, un 55% más que en 2017. Un crecimiento que se sumó al ya experimentado el año pasado, cuando la facturación resultó un 59% superior a la cifra de 2016. La compañía que dirige José Neves también arrastra, no obstante, pérdidas. El año pasado Farfetch declaró perdidos 112 millones de dólares, un 37% más que lo cosechado en 2016.
Invertir en Farfetch: ¿oportunidad para el e-commerce del lujo?
En el caso del sector de la moda de lujo, los números convierten la inversión en Farfetch en algo atractivo. De acuerdo con la consultora financiera Bain and Company, el mercado global de bienes personales de lujo generó en 2017 ingresos por valor de 307.000 millones de dólares. Y dicha cifra se espera que aumente para 2025, alcanzando los 446.000 millones de dólares.
El comercio electrónico se ha llevado parte del pastel. En concreto, un 9% de las ventas obtenidas en 2017. Y para 2025, la consultora estima que esa porción se situará en el 25%.
Dirigido a un público con un poder adquisitivo alto, el marketplace británico ha conseguido atraer a 2.3 millones de usuarios a nivel internacional. Y de éstos la compañía asegura que 1,1 millones de clientes son compradores frecuentes.
Hoy en día el marketplace aglutina a 614 vendedores, entre grandes y pequeñas firmas de moda, la mayoría de ellas además procedentes de Reino Unido, y de cuyas ventas la firma británica se hace con un porcentaje en forma de comisión. Así, por la compra de un bolso de Gucci, un llavero de Dolce y Gabbana o unos zapatos de Jimmy Choo, el marketplace se lleva al bolsillo un 22%.
La compañía también asegura que el 98% de sus vendedores son exclusivos del marketplace. Ello se debe a que las firmas de moda de pequeño tamaño no disponen de tienda online propia y eligen la plataforma como su canal de venta por internet. Es el caso, por ejemplo, de la sastrería Yusty, de Madrid, que según recogen en SModa, decidió unirse al marketplace después de lo complejo que les resultaba desarrollar un e-commerce propio.
Seguramente, todos estos datos han pasado desapercibidos, no obstante, por quien es quizás uno de los accionistas más peculiares de la compañía. PETA, la ONG en defensa de los derechos de los animales, ha afirmado que adquirió acciones el primer día en el que el marketplace salió a bolsa, aunque no ha revelado el número ni cuánto ha pagado por las mismas. De acuerdo con Yvonne Taylor, directora de proyectos corporativos de PETA, al contar con acciones podrá asistir a las reuniones anuales de la compañía e “instar oficialmente al fin de la venta de artículos de piel”.
Farfetch ha prometido que a partir del 31 de diciembre de 2019 en el marketplace ya no habrá hueco para los productos fabricados con piel de animal. Un tiempo en el que también se podrá valorar si, al final, el marketplace de la moda de lujo resulta una inversión de oro.