Eroski. Venta de activos para salir del túnel

El Grupo de distribución ha decidido plantear a la banca acreedora la reestructuración de su deuda. Sin otra opción, que le permita salvar la delicada situación que atraviesa, Eroski intenta renegociar un crédito sindicado de 2.500 millones con 22 entidades financieras para una posible quita del 50%, en una operación gestionada por Morgan Stanley y Deloitte.

En el último ejercicio Eroski registró unas pérdidas atribuidas de 121 millones de euros, casi el triple de la cantidad generada el año anterior. Entre 2009 y 2011, la empresa logró amortizar 1.100 millones de euros de su deuda, pero la caída de las ventas, y el lastre de la integración de Caprabo, que adquirió por 1.300 millones de euros, han hecho mella en los planes de la cooperativa.

En el último año, la empresa ha transferido al consumidor un ahorro de 107 millones de euros, gracias al ajuste de precios y ha reducido su deuda en 44 millones. Las pérdidas –sin el efecto de los resultados no recurrentes- se situaron en 70 millones de euros, que representaron una mejora del 15% frente a los resultados comparables del año anterior.

Ahora, el grupo busca alternativas que permitan la viabilidad del negocio de alimentación. Una de las medidas apunta a la venta de activos no rentables, tiendas en el centro y sur peninsular, para concentrar el negocio en la zona norte y Baleares.