Eliminar la ‘tasa rosa’, asignatura pendiente en perfumería
No todos los productos de consumo tienen el mismo baremo de precio. El coste de una cuchilla de afeitar, un desodorante o un champú, viene determinado en la mayoría de los casos por el género del destinatario, aunque sea el mismo artículo.
Para analizar la desigualdad de género en el importe, entre las versiones femeninas y masculinas, el portal Idealo.es ha investigado a 25 marcas diferentes en España, reflejando en sus resultados un preocupante incremento progresivo del importe de la versión femenina, sobre todo en el área de Perfumería. A esta diferencia se le conoce como ‘tasa rosa’ (impuesto de género).
En concreto, el 74% de las versiones destinadas para mujeres son más caras que la de los hombres. El precio medio de las fragancias analizadas es de 0,66 euros por mililitro, ocho céntimos más que las variantes masculinas, lo que significa una diferencia media de un 347%, con respecto a los resultados de 2016 -el primer estudio realizado por el portal-.
Además, entre otros datos, el 12% de los perfumes femeninos estudiados hace tres años se podían adquirir al mismo precio que sus variantes masculinas, frente a solo el 7,89% en 2018, lo que representa una caída superior al 4%. En cambio, los productos ‘para hombres’ con un importe más caro sí han reducido su importe (18,4%).
Alemania, el país más igualitario
El impuesto de género no solo ocurre en España, es un problema internacional. Idealo.es también ha analizado la diferencia de precios de los 100 perfumes más buscados con versiones para hombres y mujeres en: España, Francia, Italia, Reino Unido y Alemania. Entre los resultados, se refleja desigualdad del coste en cada una de las regiones.
En ese sentido, los precios de variantes féminas son entre un 6% y 8% más elevados, observándose la mayor diferencia en Francia (9%). En cambio, Alemania, es la región con menor diferencia, una media de 6% entre ambas versiones.
“La ‘tasa rosa’ es un ejemplo de que, para llegar a una sociedad igualitaria, todos tenemos que poner de nuestra parte, empezando por las empresas que ofrecen productos y servicios, cuyos precios para el mismo producto no deberían, en ningún caso, variar por género”, declara Adrián Amorín, country manager de idealo.es.