El sector de perfumería estima cerrar 2021 con un crecimiento del 30%
Las buenas sensaciones que deja la campaña navideña y el descenso de la presión de la variante ómicron en las últimas semana, hacen que la perfumería mire con optimismo su nueva cita clave: San Valentín, el 14 de febrero, fecha en la que los perfumes vuelven a ser uno de los artículos más regalados.
Después de un 2020 marcado por la pandemia en el que el cosmético, en línea con el resto de sectores económicos, experimentó un parón en su crecimiento, en 2021 esta industria de perfumería y cosmética ha logrado superar la situación, con un gran impulso a los productos enfocados al bienestar. Tal es así que la previsión apunta un crecimiento de la categoría de perfumería de casi un 30%, en comparación con los datos de hace dos años, como ha publicado Stanpa, la Asociación Nacional de Perfumería y Cosmética.
En ese sentido, los datos reflejan que este sector fue clave en las compras navideñas. Pese a ser positiva la cifra, aún no es suficiente para compensar las caídas sufridas durante la pandemia para que podamos hablar de recuperación a niveles prepandemia.
Cosmética de color
Los labiales, que históricamente han constituido el elemento fundamental de reactivación de distintos periodos de crisis, se han visto lastrados por la llegada de la pandemia. En 2021, el color de ojos, la máscara de pestañas o el color de cejas y uñas, ayudaron a realzar las zonas del rostro que no quedan ocultas, adoptaron mayor protagonismo, impulsando la categoría de cosmética de color.
Cuidado de la piel
La parte social no es la única variable, puesto que cada vez somos más consciente de la importancia de nuestra salud de una forma integral y, en consecuencia, desde el sector “se percibe una mayor preocupación por los productos para el cuidado de la piel, dada la estrecha relación de ésta con el estado emocional”. Esta categoría ha aumentado durante los meses de pandemia y ya se sitúa la primera por volumen de negocio, bien bajo la modalidad de autotratamiento en casa o con el progresivo regreso a unos centros de estéticas que, poco a poco recuperan su actividad.
En conjunto, esta categoría de cuidado de la piel evoluciona con un incremento del 12% en 2021, respecto a 2020, destacando el cuidado del rostro, con un repunte del 14% durante los primeros nueve meses del año pasado.
España, segundo exportador de perfumes
La evolución positiva de las categorías se refuerza con el comportamiento de las exportaciones en 2021. En perfumería, se han visto incrementadas un 46% hasta septiembre; cosmética de color, un +34%; y en aceites esenciales, un 15%. Los productos cosméticos nacionales están presentes en más de 150 países, con una buena acogida en el mercado internacional, gracias la relación calidad y precio de los artículos, además de su avanzada tecnología, permitiendo que España se haya convertido en el segundo exportador mundial de perfumes y se situé en el Top 10 de cosméticos.
Previsiones de cerrar 2021 con un volumen de 8.100 millones de euros
A la espera de conocer los datos definitivos de 2021, las perspectivas del año pasado son “positivas”, ha indicado la directora general de Stanpa, Val Díez. De alcanzar las previsiones, se espera un volumen de consumo de 8.100 millones de euros, un 6,5% más que en 2020, próximo a niveles de prepandemia.
La directora general ha añadido que los sectores “de la perfumería y la cosmética es, ante todo, un sector social, y su evolución a lo largo de 2021 ha demostrado su capacidad de adaptarse a las circunstancias, pero también ha puesto de manifiesto un sentir general cada vez más patente que ansía recuperar sensaciones dormidas a pesar de las adversidades”.
“Así, la ciudadanía ha encontrado en la perfumería y la cosmética un valor de bienestar seguro en plena crisis sanitaria y se ha valido de ella para mejorar su estado de ánimo y encontrar nuevas formas de expresión, aumentando su consumo al tiempo que la sociedad lograba salir paulatinamente de la pandemia”, ha completado la directora general de Stanpa.