El sector cárnico muestra su “malestar” ante la falta de apoyo institucional
Asici, Avianza, Intercun, Interovic, Interporc y Provacuno han enviado una carta al ministro de Consumo, Alberto Garzón, con datos básicos de esta industria en España.
La Federación Empresarial de Agroalimentación de la Comunidad Valenciana (Fedacova), ha señalado que «lamenta la falta de apoyo institucional al sector cárnico en España». Se suma al descontento de Carval, Empresarios Carniceros-Charcuteros de la Comunitat Valenciana, tras la última acción del Ministerio de Consumo que “demoniza la producción y el consumo de la carne”.
Desde Fedacova recuerdan la importancia del sector cárnico en la producción de alimentos que contribuyen a manter una dieta sana y equilibrada, así como pone “en peligro cientos de negocios y empleos en la Comunidad Valenciana, afectados por los efectos del cierre de la hostelería debido a la pandemia”, como completan desde Carval.
José Rodrigo, como presidente de la federación Carval y del gremio de Carniceros-Charcuteros de Valencia, ha denunciado “que estas campañas que persiguen el consumo de carne, con afirmaciones erróneas o desenfocadas, pueden provocar una caída aún mayor de las ventas y poner en riesgo el futuro de un sector considerado esencial, que da trabajo a cientos de empresas familiares y proporciona un importante servicio de proximidad”.
Carta al Ministerio de Consumo
En este contexto, seis organizaciones interprofesionales del sector cárnico (Asici, Avianza, Intercun, Interovic, Interporc y Provacuno) han enviado una carta al ministro de Consumo, Alberto Garzón, con datos esenciales de esta industria en España.
Entre los argumentos expuestos, el texto señala que “España es el país más saludable del mundo (según el ranking de Bloomberg, Healthiest Country Index)”, “España es el país con mayor esperanza de vida del mundo (según el IHME de la Universidad de Washington y la prestigiosa revista científica The Lancet)” o, sobre cambio climático, “el 80% de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) procedentes de la ganadería en el mundo provienen de los países en vías de desarrollo (FAO, 2017). No podemos contribuir a mitigar el cambio climático con una visión eurocéntrica”.