El quick-commerce y el desafío de la rentabilidad. Se avecinan más movimientos
Las startups de delivery que entregan pedidos en 15 minutos deben doblar el tamaño de su cesta y cuadriplicar pedidos para alcanzar la rentabilidad.
El sector del llamado quick-commerce, formado por aquellas startups de reparto que entregan en 15 minutos o menos, se enfrenta al desafío de alcanzar la rentabilidad. Un objetivo que lograrán cuando doblen el tamaño de su cesta de la compra y cuadrupliquen su volumen de pedidos.
Según los cálculos realizados por la consultora Bain & Company, para que las empresas del sector quick-commerce, como son Getir, Gorillas o Dija, consigan un ebit del 4% al 6%, será necesario que estas realicen más de 1.500 entregas al día y que el tamaño de cada pedido oscile los 30 euros.
Entre las razones de esta falta de rentabilidad, la consultora destaca el no haber alcanzado la economía de escala y la necesidad de realizar importantes inversiones de marketing para adquirir y retener a nuevos clientes en su fase de lanzamiento.
“Con el modelo actual de entrega exprés, para alcanzar la rentabilidad positiva sería necesario multiplicar por cuatro el volumen y duplicar el tamaño medio de la cesta de la compra. Y que estas dos circunstancias se dieran a la vez”, ha subrayado André Carvalho, socio de Bain & Company.
Según Carvalho, este escenario tardará en llegar tanto en España como en Europa, y recomienda a estas empresas que tengan como prioridad “aumentar la penetración del servicio, captando y reteniendo clientes a un ritmo superior al de sus competidores, ya que la escala es fundamental”.
Posibles escenarios
Ante este escenario, desde la consultora prevén nuevos movimientos entre los actores del sector. Competir para convertirse en el líder de los mercados en los que operan; entrar en geografías a las que aún no han llegado sus competidores; fusionarse con otras plataformas de comercio o delivery; dar servicio al comercio tradicional o ampliar el servicio de entrega rápido a categorías de producto de mayor margen y tamaño pequeño – como puede ser farmacia o cosmética-, se perfilan entre ellos.