El marketing directo gana adeptos

El marketing directo gana posiciones en España como medio de comunicación con clientes potenciales, según el último estudio Direct Marketing Monitor Internacional, elaborado por Unipost.

El informe que analiza las tendencias del mercado del marketing directo en treinta países señala que el 90% de los consumidores españoles siente afinidad hacia los envíos de correo directo. Aunque la distancia con el resto de Europa en lo que se refiere al uso de este canal de comunicación es todavía considerable. En nuestro país se registran unos 120 envíos por persona y año, mientras que la media europea se sitúa en 250.

El incremento de la influencia del marketing directo en España, también se ve en el número de personas que responden a los maillings de empresas, que ha pasado del 16% en 2004 al 32% durante el último año. Pese a ello, la proactividad del consumidor español a la hora de contestar a un envío es todavía inferior a la media europea, situada en el 45%.

El DMMI analiza también el fenómeno de la venta por correo, cuyo grado de desarrollo en nuestro país se encuentra aún por detrás de las cotas europeas. De hecho, un 28% de los españoles que reciben información de un producto a través de un mailling adquiere ese artículo por correo, frente al 52% de los europeos. Siete de cada 10 consumidores españoles que responden a un mailling prefieren desplazarse al punto de venta para examinar el producto publicitado por sí mismos.

A la hora de definir los temas que interesan al hombre y la mujer en España, el análisis de Unipost muestra claras diferencias. Mientras que la consumidora tiene especial interés en recibir envíos de marketing directo realizados por empresas de cosmética (97%), decoración (69%) y moda (62%), el hombre es especialmente receptivo cuando la publicidad que llega a su hogar tiene que ver con la electrónica (83%), los coches (75%) y el deporte (71%).

Ambos sexos coinciden, eso sí, en el interés por los envíos relacionados con el entretenimiento, los viajes y el turismo o las telecomunicaciones. Aunque los temas de salud y bienestar captan la atención del ciudadano en todo el mundo, en España el interés es mayor, hasta el punto de que el 57% de los consumidores muestra afinidad hacia este tipo de publicidad, frente al 43% de los europeos.