¿Cómo compran los madrileños?

En julio de 2012 entró en vigor la Ley de Dinamización Comercial de la Comunidad Madrid. Desde entonces, han pasado más de 20 meses en los que los hábitos de compra de una gran parte de los madrileños (43,5%) se han visto modificados.

Es la consecuencia directa de la liberalización de horarios comerciales que, sin duda, favorece al consumidor. De la parte empresarial, el beneficio viene por la generación de empleo, 12.967 puestos de trabajo -un 5,2%- cuando en España se perdieron 12.027 empleos y la creación de 5.018 empresas en el sector minorista (20% del total nacional).

Buenas noticias, que se desprenden del primer “Estudio sobre los hábitos de consumo en Madrid”, elaborado por la Consejería de Economía y Hacienda para conocer el impacto de la norma en los ciudadanos y averiguar quién, dónde, cómo y qué compran los madrileños, a partir de 1.095 entrevistas a residentes en la Comunidad, mayores de 18 años. El 68% percibe la norma como una mejora y el 41,3% se siente beneficiado con la nueva ley, mientras que para el 55,7% parece que nada ha cambiado. Hay que tener en cuenta que Madrid ya contaba con 22 domingos y festivos en los que los comercios abrían sus puertas.

Como ya se ha dicho, más del 40% -equivalente a 2,8 millones de personas- afirma que ha cambiado sus prácticas a la hora de comprar. Sin embargo, un 54% asegura que no ha variado su comportamiento. No obstante, lo cierto es que cuando una tienda abre, la gente compra. Así lo ha manifestado el 56,2% de los madrileños que reconoce haber adquirido algún producto en domingo o festivo, principalmente en medianas y grandes superficies (89%), pero también en comercios de proximidad (44%).

Por lo que respecta al sexo, parece que los que más se acercan a los comercios en festivos o domingos son los hombres (62,6%), sobre todo los comprendidos entre los 18 y 44 años (67,8%). En menor medida, figuran los varones casados o emparejados (61,9%) y por encima de todos ellos, los universitarios (72,3%).

Estos últimos son los más proclives a comprar en jornadas festivas o domingos (78,7%). Les siguen los trabajadores activos (67%), los parados (66,5%), las amas de casa (44,5%), los jubilados (38,7%) y la población inactiva (21,7%).