Caprabo, dividido en tres
La cadena Eroski sigue con el proceso de integración de los negocios de la compañía catalana Caprabo. Si a primeros de año reestructuró los órganos de gobierno de ésta, ahora ha sido el turno de su red comercial. Dependerá de tres sociedades distintas.
Hace unos meses el grupo de distribución vasco estableció que los supermercados que cambian su marca por Eroski serían gestionados directamente por la compañía presidida por Constan Dacosta, mientras que aquellos que mantienen la enseña tras la adquisición (Cataluña y algunos en Madrid) quedan bajo el control de un administrador único, la sociedad Central de Serveis Ciències (CSC) que sustituye al Consejo de Administración de Caprabo.
Estos últimos, según se conoció a finales de marzo cambian su imagen corporativa. Caprabo amb Eroski, en Cataluña, y Caprabo con Eroski, en Madrid, acompañado en algunas casos de la frase “juntos te damos más”.
Para los que pasan a manos de Eroski, se han creado dos filiales, una (Supermercados Picabo) que gestionará los supermercados de la cadena catalana que serán Eroski City y Eroski Center, y otra (Gestión de Hipermercados Caprabo Eisa) que controlará los establecimientos que se transformen en hipermercados Eroski.
La sociedad Central de Serveis Ciències (CSC) está participada al 75% por Eroski, representado en la figura de Javier Amézaga, director general de Caprabo, al 19% por Pere Botet, uno de los miembros de las familias fundadoras de Caprabo (Elías, Botet y Carbó) y el resto está en manos de La Caixa.