Alimentación, 4.400 euros por hogar y año

El poder adquisitivo de los consumidores es cada vez menor. La situación económica no mejora y toca recortar gastos. Sin embargo, hay partidas imprescindibles, que siguen manteniéndose, como la comida y la bebida. Consideradas necesidades básicas, cada hogar paga por ellas una media de casi 4.400 euros y cada persona, cerca de 1.700 euros. La carne es el producto estrella al que se destina más dinero (un 23% del total), mientras que los espirituosos y licores son las categorías en la que menos gastamos, apenas el 1%.

Entre los dos extremos, se encuentran el pan y los cereales con un 15%: leche, queso y huevos, con un 12%; frutas y hortalizas, con cerca del 9%; aguas minerales, bebidas y zumos, con el 5% y el resto menos del 4% del presupuesto total de las familias.

Son las principales conclusiones de un informe realizado por Eroski Consumer, a partir de datos del INE (Instituto Nacional de Estadísticas) sobre 70 categorías de productos, en 17 comunidades autónomas. De acuerdo con los resultados obtenidos, quienes más dinero invierten en alimentación y bebidas son los vascos, casi 5.000 euros por hogar. Por el contrario, Extremadura es la comunidad que menos dinero gasta, con un promedio por hogar de casi 3.800 euros.

¿DÓNDE SE GASTA MÁS?

Entre las regiones con un gasto por hogar superior a la media figuran Navarra, Galicia, Cataluña, Aragón, Andalucía, Madrid y Murcia. Además, los cuatro primeros territorios son también los que presentan una mayor tasa per cápita en tener un gasto medio por persona superior a la media, además de Asturias, La Rioja y Castilla y León.

A su vez, el gasto medio por hogar inferior a la media se registra en Castilla-La Mancha, Islas Baleares, Canarias, Cantabria, la Comunidad Valenciana, Castilla y León, Asturias y La Rioja. Sin embargo, en cada una de las 17 comunidades autónomas se produjeron variaciones en el periodo analizado.

En términos generales y según el estudio, la evolución del gasto en alimentación en estos cinco años ha sido negativa. La inversión media por hogar ha disminuido un 3%, mientras que por persona ha aumentado casi un 2%. Por tipo de producto, se advierten diferencias importantes. Así, mientras el presupuesto medio familiar de los aceites y grasas cae cerca de un 40%, el del café, el té y el cacao crece un 24%.