Conservas, una familia numerosa
Las conservas componen una extensa familia de productos enlatados, que alcanza sus mayores ratios en las categorías de vegetales y pescado, presentando una evolución diferente en cada segmento. Se trata de una industria tradicional, cuya materia prima depende del sector primario, de la agricultura en el caso de los vegetales, y de la pesca, en las conservas de mariscos y pescados. La madurez alcanzada no impide que la innovación y la diversificación estén presentes, transformando algunas conservas en platos preparados o alimentos convenience, en línea con las últimas tendencias en alimentación.
Vegetales, soluciones de comida
La distribución organizada se ha visto favorecida por las últimas generaciones de conservas, que renuevan envase y contenido, haciendo el producto más natural, práctico y saludable (bajo en sal, sin colesterol, con abrefácil, tarro de cristal, para consumir en el propio envase, calentar en microondas, etc.). Estas mejoras requieren grandes presupuestos en I+D+ i, que suelen acompañarse con fuertes campañas de promoción y publicidad.
MDD, primera en ventas
La MDD concentra más de la mitad del mercado de conservas vegetales (56,4% en volumen y el 47,3% en valor), aunque ha caído más de 2 puntos porcentuales en el último año. El top marquista está encabezado por Bonduelle (13,2% en volumen y 19% en valor), que sube desde el último año, al igual que Pillsbury Ibérica, El Cidacos y Martínez.
En las tres primeras categorías (maíz en grano, judías y guisantes) también gana la MDD, que incrementa cuota en judías y guisantes, mientras que el maíz en grano reduce participación. En este segmento rivaliza con Bonduelle (19,2% y 23,8%); en judías compite con Conservas Manero (18% y17%) y en guisantes con Martínez.
Pescados y mariscos, marchamo de calidad
Las conservas de pescado han generado una industria atomizada, que apuesta por la internacionalización de la producción española con marchamo de calidad.
El atún es el producto estrella y el rey de las ventas en los canales de alimentación. El consumo nacional de este pescado se acerca a los 4 kilos per cápita, lo que supera la media europea y la mundial. Galicia es el segundo exportador mundial de atún, pero su fuerza exterior choca con el mercado interior, pues aunque el atún supone cerca de la mitad de la producción total, la industria española sufre graves problemas de abastecimiento. Desde ANFACO (Asociación Nacional de Fabricantes de Conservas de Pescado), se propugna un nuevo rumbo de la industria para que promocione su producción con alimentos de valor añadido y sello de calidad, apartándose de la dependencia exterior.
Túnidos
Según los datos de IRI España el mercado de túnidos representa un volumen superior a los 96 millones de kilos y 597 millones de euros, lo que significa sendos aumentos del 5,8% y del 14% en el último año. La mayor partida corresponde al atún claro, que suma más de las tres cuartas partes del mercado (76% en volumen y 74% en valor) y sigue creciendo (4,2% y 13,7%, respectivamente).
La MDD vuelve a liderar el negocio, con el 63,5% del volumen y el 57,5% del valor en el subsector de atún aceite vegetal, y el 54% del volumen y el 46,2% de las ventas en aceite de oliva. Calvo, con más de un cuarto del mercado, es la segunda referencia de atún claro en aceite vegetal (22% en volumen y 26,5% en valor), mientras que Albo ocupa la misma posición en aceite de oliva (26,5% en volumen y 32% en ventas)
Mirando al exterior
Las exportaciones de conservas y semiconservas de pescados y mariscos evolucionan al alza, habiendo alcanzado un total de 31.065 toneladas, que significaron un aumento del 10,5% y unas ventas del 108,2 millones de euros, que representaron un incremento del 9%. El atún capta el 62% del total exportado. El único producto que ha reducido sus ventas externas ha sido la anchoa, 394 toneladas, frente a las 402 de 2006. Los países de la Unión Europea son los principales clientes de nuestras conservas de mar, con Italia a la cabeza, seguida de Francia, Portugal y Alemania, USA y Reino Unido.
