IDH destaca la eficiencia de las etiquetas EP

Para implementar correctamente sus soluciones de seguridad anti hurto, el retail debe conocer ciertos parámetros de cada sistema empleado. Los sistemas EAS, es decir, las antenas, deben seguir determinados requisitos para resultar realmente eficientes. Las cuestiones principales son la altura de desactivación y la fiabilidad, es decir, asegurarse de que las etiquetas se desactiven de forma eficaz para evitar las alarmas no deseadas.

También es fundamental el índice de detección, o sea, la distancia a la que se activa la etiqueta, la detección según la anchura del pasillo y la calidad global (el porcentaje de etiquetas que funcionan realmente).

Además de estos parámetros, es indispensable que las etiquetas puedan aplicarse de forma fiable a distintos tipos de productos sin problemas, por ejemplo, a productos de metal o alimentarios.

El Instituto de Logística de Distribución y Comercio (IDH), con sede en Dortmund, llevó a cabo hace poco una investigación independiente acerca de la eficacia de las distintas soluciones EAS. Este instituto testa la aplicabilidad de los sistemas de Autoidentificación (es decir, la RFID, el código de barras, el OCR, el código 2-D) en los procesos de las cadenas de suministro. Realizan talleres que ofrecen asistencia para la implantación de estas tecnologías en sistemas existentes de las cadenas de suministro y estudian los aspectos de distintas implantaciones, como los costes y beneficios, la rentabilidad de la inversión y la viabilidad. Entre quienes consultan a este instituto se encuentran las mayores empresas minoristas del mundo y sus proveedores de soluciones.

Para probar las etiquetas EP de Checkpoint, IDH dividió un área entre dos antenas en quince puntos a tres alturas distintas y cinco distancias horizontales distintas en el interior de la puerta. La primera posición horizontal (para tres puntos de referencia) estaba en medio de la puerta. Después cada 30 cm (a ambos lados de la puerta) se situaron 3 puntos de referencia más. Esto se hizo porque la anchura de puerta que solicitan los clientes en ocasiones varía. Además de utilizar etiquetas unidas a tubos de madera, el instituto también comprueba la detección de etiquetas unidas a productos. Ello permite comprobar problemas de desactivación y la utilidad específica para distintos tipos de productos.

Este instituto independiente analizó las etiquetas EP 410 y 710 de Checkpoint Systems. Comprobaron tres tamaños distintos: la etiqueta de 40 X 40 mm, la de 38 X 32 mm y la más pequeña, de 22 X 47, que sirve para proteger productos de lencería o productos de salud y belleza, así como para incorporarlas a las etiquetas de precio. Llevaron a cabo pruebas con las antenas Evolve, y los resultados fueron sobresalientes. A una distancia de 200 cm alcanzaron un índice de detección del 95% o superior, y a 180 cm los niveles de detección ya alcanzaban el 99,5%. También compararon los índices de detección en distintos sistemas de puertas y descubrieron que, en comparación con la generación anterior de radiofrecuencia, Evolve mejoraba los resultados en un 20-40%.

El tamaño de las etiquetas es importante, sin embargo, la etiqueta EP más pequeña analizada, de 22×47 mm, utilizando la antena Evolve, mostraba niveles de detección del 90%, comparado con una etiqueta el doble de grande. O sea, que la detección sólo era un 10% menor en una etiqueta que era la mitad de pequeña.

Dado el contexto económico actual, el retail ha de ser consciente de que si al incremento de la pérdida desconocida añadimos el descenso de la facturación, se produce una merma importante de beneficios. Por eso, el retail se encuentra en un momento clave. Debe evitar el hurto e incentivar al mismo tiempo el aumento de las ventas. Y, como hemos visto, la tecnología ya permite que puedan lograrse ambas cosas.