El futuro será digital; interactivo y móvil

Dicen los gurús de la comunicación que el futuro será digital, interactivo y móvil. Igual que el marketing. Porque la sociedad gozará de esas mismas características. El impacto de las nuevas tecnologías nos está indicando el camino.

Por su parte los consumidores se han convertido en déspotas ilustrados y quieren participar incluso en laceración de los mensajes. Hasta se están convirtiendo, gracias a las posibilidades que les brinda Internet, en comunicadores y medios.Ya nada es como antes.Y lo será menos a pocos años vista.
Las posibilidades que ofrece la web 2.0 al marketing y a la comunicación comercial son ya innumerables. Basta con observar el fuerte componente interactivo que acompaña a cualquier campaña que se precie. Y la web 3.0 está en camino con más posibilidades,
mientras la inversión publicitaria aumenta a pasos agigantados en Internet, que continúa creciendo incluso en época de crisis como la que estamos viviendo. En el Reino Unido es ya el segundo medio publicitario. El teléfono móvil va a ser otra herramienta clave para la comunicación comercial y el marketing del futuro, según aseguran los que saben de estas cosas.
¿Qué va a pasar entonces con los medios convencionales, prensa, radio televisión, etc.?
No van a desaparecer, no temamos. Van a convivir con los nuevos, expresándose muchos de ellos también a través de los nuevos canales, como los periódicos y resvistas, la televisión y la radio, buscando y ampliando las audiencias allí donde se encuentran, aprovechándose, como es lógico, de las posibilidades que les brindan las nuevas tecnologías. En pocas palabras, adaptándose al nuevo entorno y sufriendo unos más y otros menos en esa puesta al día.
Otra palabra mágica en ese apasionante futuro que ha empezado ayer es innovación. Innovación y creatividad, tanto en el marketing, la comunicación y los productos como en todas las áreas de la empresa. Innovación 360 grados. Por otra parte, las marcas seguirán siendo el punto de referencia, según los expertos. En ese futuro cambiante que nos espera, pese al empuje de la distribución con las suyas.
Cuando en 1974 nacía Distribución Actualidad en el panorama audiovisual español no existía más que una televisión, TVE. Con media docena de veces que apareciera un anuncio en la pequeña pantalla quedaba enterado el país del nuevo lanzamiento. El pase de un spot de 20 segundos costaba en prime time 230.000 pesetas de lunes a viernes y 244.000 los domingos. Los anunciantes, sin embargo, consideraban el precio excesivo.
¡Qué tiempos aquellos, Miguel de Haro!

(En noviembre de 1974, Manuel G. Carbajo, era director de IPMark y estaba “empezando a hacerme mayor”)