El comercio minorista encadena 16 meses de caídas

En agosto de 2009 las ventas del comercio minorista experimentaron una caída interanual del 4% en términos constantes. Si se excluye la evolución de las estaciones de servicio (-0,9%) el descenso se situaría en el 3%.

Eliminado el efecto calendario, el índice del comercio al por menor alcanzó una tasa negativa del 4% en el mismo mes.

Los datos, aportados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), revelan 16 meses consecutivos de disminución de la facturación detallista y otros 13 que encadenan una contracción del empleo, situada en el 4,6% en el pasado agosto.

El desglose por segmentos indica que las ventas bajaron en todas las categorías, excepto en otros bienes, donde se registró un leve incremento (0,9%). Por el contrario, en alimentación la reducción llegó al 4,5%, el doble que a de productos no alimenticios que fue del 2,3% e inferior a la de equipamiento de hogar, que llegó al 12,8%.

La curva de descenso también impactó en los canales. Las empresas unilocales no pudieron frenar un recorte del 6,3% en las ventas, mientras que en las pequeñas cadenas caída alcanzó casi el 5%; en las grandes superficies el 4,4% y en las grandes cadenas el 0,4%.

Así las cosas, parece lógico que el sector retail haya mostrado públicamente su descontento por la subida de impuestos anunciada por el Gobierno. La Confederación Española del Comercio (CEC), sostiene que la medida nunca favorecerá la reactivación del consumo y reclama incentivos fiscales a las familias para la adquisición de bienes duraderos, así como una deducción del 10% (como mínimo) en el impuesto directo que grava a comerciantes y autónomos. En la misma línea, la Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución (ANGED), considera que la dinamización del consumo supondría un mayor impacto recaudatorio que la subida del IVA. Además, exige la aplicación plena de la directiva europea de servicios y la liberalización del sector.