Turrones y cava, equilibrio difícil
Navidad, cava y turrones. Un triángulo que se repite cada año, pero que esta campaña tendrá difícil mantener las ventas.
Los productores del espumoso nacional prevén una caída del 5% en el volumen, provocada por la bajada del consumo, que ya supuso un retroceso del 3,13% en la última campaña, saldada con más de 98 millones de botellas, frente a los 101 millones largos cosechados en 2006, que fue ejercicio récord, según datos del Consejo Regulador del Cava (CRC).
El año pasado las ventas experimentaron un mejor comportamiento, con un valor de 224,95 millones de euros, que revela un leve crecimiento.
Las principales empresas del sector reconocen la atonía del mercado interno en unas fechas que deberían ser las “mejores del año”. No obstante, las patronales, como el Institut de Cava o Pymecava, confían en mantener la facturación, vía exportaciones. Las expectativas para el champán pintan igual. El año concluirá con 300.000 botellas menos.
Por lo que respecta al turrón, la Asociación Española de Fabricantes de Turrones y Mazapanes (TUMA), mantiene cierto optimismo, a pesar de la caída del 10% en la demanda de Jijona y Alicante.
El Consejo Regulador de la Indicación Geográfica Protegida de estos turrones ha constatado una reducción de los pedidos en los últimos meses ( 7% en septiembre y 10% en noviembre), aunque se ha debido en su mayoría a lotes de Navidad y no tanto al canal de alimentación.
Este organismo se ha propuesto incentivar el consumo a través de la publicidad y en 2008 destinará una cantidad mayor (700.000 euros) a campañas en televisión.
En 2007, el mercado de dulces navideños aumentó sus ventas un 1,1% (279 millones de euros) y un 5,7 el volumen (33.752 toneladas).