SEPA, fin del roaming financiero
La entrada en vigor de la SEPA (Single European Payment Area) en el mercado español contribuirá a hacer más ágil, fácil y sencillo el eurosistema financiero, al eliminar el roaming. La tecnología desempeña un papel estratégico para que las empresas, entidades de crédito, emisores de adeudos directos, administraciones públicas, etc. puedan abordar con éxito este cambio.
Por ello, Datisa, compañía especializada en la fabricación y comercialización de software ERP, ha incorporado en sus soluciones las herramientas necesarias para cumplimentar con éxito, los requisitos que estipula la nueva regulación.
En la normativa SEPA, el código internacional BIC, que identifica a la entidad bancaria a la que pertenece el IBAN, es un campo de obligado cumplimiento. Además, introduce la obligatoriedad de que exista un mandato firmado en el que el deudor debe autorizar al acreedor a realizar un cargo en su cuenta bancaria, al menos, si no se quiere correr el riesgo de tener un impago durante los 13 meses siguientes “Por ello, los desarrolladores de software se han volcado en integrar funcionalidades que sean capaces de cumplimentar los BIC de manera automática en las fichas de bancos, clientes y proveedores. Incluso algunas compañías han elevado el desarrollo hasta la posibilidad de sugerir los BIC una vez introducidos los IBAN de cuentas nacionales”. explica Isabel Pomar, directora comercial de Datisa.
Como novedades con respecto a las órdenes de domiciliación tradicionales, cabe podemos destacar los siguientes puntos: existencia de un número de referencia, cuyo cálculo implica datos tanto del emisor como del deudor; indicación expresa si es una autorización para un pago único o para pagos periódicos; en el caso de B2B (recibos entre empresas) la orden de domiciliación debe ser remitida a la entidad bancaria para que conozca su existencia y caducidad de las órdenes de domiciliación caducan de forma automática a los tres años, si no se ha producido ningún movimiento.
En relación con los mandatos, Datisa advierte de que puede haber varios mandatos por cliente, incluyendo la funcionalidad de referencia única; la gestión de referencias recurrentes y únicas; la impresión de las mismas; la capacidad de su custodia de forma electrónica; el control del estado de la orden de mandato (pendiente de emisión/recepción, anulación, caducada, etc.) y las diferentes fechas asociadas a cada uno de estos estados.