10 tendencias de pagos para 2025

La quinta tendencia está focalizada en los centros de pago componibles basados en el Cloud, los cuáles ofrecen funciones de procesamiento de pagos unificadas, rentables y consolidadas.

La industria de pagos se está acelerando rápidamente en 2025 con nuevas tendencias que definirán el futuro de la industria. La última investigación de Capgemini dicta cómo evolucionará el futuro de los pagos.

El primero de los casos está centrado en las finanzas abiertas, las mismas que crecerán a medida que los órganos reguladores mejoren el acceso a los datos financieros. Las finanzas abiertas fomentan la competencia en el mercado a través de la innovación en los productos y servicios que los bancos ofrecen a los clientes. Además, fomenta un ecosistema financiero inclusivo y conectado, permitiendo a los bancos impulsar una mayor personalización de los productos y servicios bancarios. Sin embargo, según el Informe Mundial de Pagos 2025 , el 62% de los bancos no está preparado para la transformación necesaria para adoptar las finanzas abiertas.

La segunda tendencia abarca la rápida adopción mundial de los pagos instantáneos. Su llegada afecta a las tarjetas mientras las wallets de las BigTech consolidan su dominio, lo que afecta significativamente a la rentabilidad de los pagos. Con la preferencia de los pagos instantáneos sobre los cheques y las tarjetas de débito a nivel global, los bancos pueden beneficiarse de la reducción de los costes de transacción.

El paso de las pequeñas transacciones a los pagos instantáneos de cuenta a cuenta (A2A), de bajo coste y sin intermediarios (como las redes de tarjetas), puede estimular la adopción de los micropagos entre los consumidores. La trazabilidad que ofrecen los pagos instantáneos ayuda a las pequeñas empresas a acortar los ciclos de conversión de efectivo, por lo que los comerciantes esperan beneficiarse de transacciones rápidas y asequibles.

La tercera tendencia está basada en las innovaciones de pago en el punto de venta (TPV) son necesarias para mejorar la capacidad de aceptación de los comerciantes y aumentar las opciones de pago de los consumidores. Las innovaciones en TPV ofrecen bajos costes de mantenimiento y una inversión inicial mínima. Ayudan a los comerciantes a reducir el fraude y a obtener un acceso más rápido a los fondos.

La flexibilidad del cliente también mejora con más opciones de pago, como carteras digitales o pagos fraccionados a través de opciones de financiación como la modalidad B2B “Buy Now Pay Later” (BNPL). Los bancos y los proveedores de software de terceros se beneficiarán de un mayor número de transacciones al eliminar las fricciones en la experiencia del cliente y ayudar a los comerciantes a fidelizar a sus clientes mediante analítica de datos.

La cuarta tendencia se centra en los corredores de pagos instantáneos multiterritoriales, los cuáles están mejorando los pagos transfronterizos, dotando a las empresas de mayor velocidad y eficiencia. Los nuevos modelos de pago transfronterizo, como la Moneda digital de Banco Central (CBDC)  y la Tecnología de Contabilidad Distribuida (DLT) , reducen la dependencia de intermediarios y minimizan las comisiones de cambio, lo que permite a los bancos ofrecer menores costes de transacción a comerciantes y empresas.

Asimismo, los corredores multiterritoriales de pagos instantáneos facilitan las transacciones transfronterizas en tiempo real, reduciendo significativamente los plazos de liquidación para comerciantes y empresas. Al ofrecer transacciones más rápidas, los bancos pueden competir eficazmente con las FinTech que ofrecen esta modalidad de pagos.

La quinta tendencia está focalizada en los centros de pago componibles basados en el Cloud, los cuáles ofrecen funciones de procesamiento de pagos unificadas, rentables y consolidadas. La arquitectura nativa en el Cloud reduce los costes operativos y mejora la interoperabilidad y el éxito de las transacciones para impulsar la eficiencia y la experiencia del cliente, al tiempo que reduce el riesgo.

Adicionalmente, ayuda a las empresas a mejorar la escalabilidad y reducir los gastos generales de infraestructura, software y mantenimiento. Al gestionar todas las operaciones de pago en un centro modular nativo en el Cloud, las organizaciones pueden adaptar las innovaciones tecnológicas de pago que mejoran la productividad y cumplir a su vez con los cambios normativos.

La sexta tendencia son los pagos multirail, los mismos que aumentarán la flexibilidad y ofrecerán distintos métodos de pago a través de una única interfaz. Los datos obtenidos a través de un sistema de pago múltiple son activos que los bancos pueden utilizar para obtener información multicanal. La riqueza de los datos permite a los bancos personalizar las recomendaciones de productos y realizar ventas cruzadas de productos o servicios financieros relevantes para impulsar el compromiso de los clientes.

Un enfoque basado en múltiples canales ofrece a los bancos una cobertura estratégica al proteger los flujos de ingresos de las fuentes de pago tradicionales, mientras siguen apareciendo nuevas fuentes de valor (como los pagos instantáneos). Además, los bancos pueden colaborar con los operadores de tarjetas para lanzar nuevas soluciones de pago.

La séptima tendencia abarca los organismos reguladores, los cuáles dan prioridad a la resiliencia operativa para fomentar la confianza en un futuro sin efectivo en los mercados y las economías. Los bancos necesitan una sólida resistencia operativa para cumplir la nueva normativa, la Ley de Resiliencia Operativa Digital (DORA), que está prevista para enero de 2025 en la UE.

Esta exige que los bancos refuercen los marcos de gestión de riesgos, la notificación de incidentes y las pruebas de resistencia ante interrupciones de las TIC. Dada la importancia de los proveedores de servicios externos para las funciones informáticas, los bancos deben llevar a cabo la diligencia correspondiente y aplicar planes de contingencia para las funciones informáticas y los proveedores más importantes.

La octava tendencia es la gestión descentralizada de la identidad digital , la cual combate el fraude y ayuda a los clientes a controlar sus datos personales. Al utilizar una red de organizaciones y métodos criptográficos, las soluciones de identidad digital descentralizada proporcionan un entorno seguro para que los bancos almacenen y verifiquen la información de los usuarios. Mediante la implantación de soluciones de identidad digital descentralizadas, los bancos pueden ofrecer a los clientes un mayor control sobre sus identidades digitales. Esta mayor autonomía fomenta una mayor confianza entre los bancos y sus clientes.

La novena tendencia está enfocada en la evolución de las remesas está reconfigurando el panorama financiero mundial, caracterizado por la caída de los costes y la rapidez de las transferencias. El Objetivo de Desarrollo Sostenible de la ONU busca mantener los costes de transacción de las remesas por debajo del 3% y eliminar los corredores que superen el 5% para 2030, con el fin de garantizar la igualdad financiera entre los países.

Los organismos reguladores del sector bancario pueden mejorar los procesos de envío de remesas estableciendo acuerdos bilaterales con los principales países remitentes y fomentando las asociaciones FinTech. Este enfoque permite una liquidación de fondos precisa y tipos de cambio competitivos en tiempo real.

La décima tendencia son los datos de los pagos, los mismos que impulsan la innovación y crean nuevas fuentes de ingresos. El estándar ISO 20022 permite a los bancos disponer de datos más completos para prestar servicios como conciliaciones de mejor calidad, pagos en tiempo real y facturación automatizada, optimizando los procesos empresariales y generando comisiones por servicios.

Igualmente, los bancos pueden utilizar fuentes de datos alternativas, como los registros fiscales o los datos de las redes sociales, para mejorar el conocimiento de los clientes, optimizar los productos financieros e impulsar la innovación en la oferta de servicios para generar ingresos adicionales.