El Corte Inglés, camino de Toledo
El alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, ha asegurado que el ejecutivo regional mantiene contactos con El Corte Inglés para renegociar el acuerdo por el que la empresa de grandes almacenes instalará un centro en la ciudad. Se trata de actualizar un compromiso, que se ha ido retrasando en el tiempo y que ahora debe adaptarse a la nueva situación económica.
El Corte Inglés ya ha depositado la fianza que le permite hacer uso de los terrenos de Santa Teresa y ahora sólo falta que la Junta de Comunidades agilice la tramitación de la permuta de este espacio para llevar a cabo la ordenación urbanística. El proyecto de la empresa de distribución contemplaba una parcela de 25.000 m2 en los más 140.000 m2 de superficie que ocupan los terrenos asignados y cuyos aprovechamientos urbanísticos se repartirían al 50% entre Ministerio de Defensa y el consistorio de la ciudad.
Hace un año, el gobierno de Castilla-La Mancha aprobó el proyecto urbanístico para la instalación de la empresa que preside Isidoro Álvarez. Un desarrollo largamente esperado, ratificado por la Consejería de Fomento de Castilla-La Mancha, en marzo de 2012. No obstante, los primeros pasos se dieron en octubre de 2011, cuando el Pleno aprobó el Plan Especial de Reforma Interior y de Mejora (Perim) de las parcelas de Vega Baja II.
García-Page, había solicitado a la presidenta del ejecutivo regional, María Dolores de Cospedal, la agilización de los trámites para la instalación del centro. En mayo de 2011 el consistorio firmó con El Corte Inglés el convenio clave para la llegada de la empresa a la capital castellano-manchega. Por su parte, la Consejería de Fomento dio vía libre a una ejecución que supondría la revitalización de los barrios de Palomarejos y Santa Teresa.
Ahora, la renegociación del contrato supone el impulso definitivo para activar el proyecto y promover una inversión que incentivará el tejido económico y social de la zona.