Caprabo: ni ERE, ni bajada de sueldos
La cadena de supermercados se encuentra inmersa en un proceso de reestructuración que le está llevando a situaciones complicadas, en busca de la rentabilidad. Empresa y sindicatos mantienen desde hace días un ‘tira y afloja’ que ha hecho que la dirección de la compañía haya dado un giro a sus planteamientos iniciales. La noticia se conocía ayer y era ‘buena’: no habrá Expediente de Regulación de Empleo, ni rebajas salariales.
El acuerdo definitivo entre empresa y trabajadores no llegará hasta el próximo 13 de febrero, fecha en que ambas partes continuarán negociando, pero, de momento, los representantes sindicales de CCOO han mostrado su satisfacción. La ‘marcha atrás’ deja en suspenso el ERE planteado el 5 de febrero, que afectaba a 400 trabajadores del grupo en Cataluña; Madrid y Guadalajara.
Tampoco se aplicará la bajada de sueldo prevista para cerca de 3.000 empleados, a los que se les recortaría el salario entre un 3% y un 20%. Por el contrario, Caprabo ha comunicado una subida del 1% para las categorías más bajas y del 0,6% para los cargos superiores, tal y como figura en el convenio.
En 2012 la facturación del grupo cayó un 6% y para este año se prevé que el descenso sea más del doble (alrededor del 13%), lo que obliga a reordenar la gestión y tomar medidas de contención de gastos. Parece que una de ellas sería contar con un solo jefe de tienda y otro de área por cada centro, lo que en la práctica supondría eliminar cerca de 1.000 puestos de trabajo, de los que algo más de la mitad podrían volver a ser recolocados en otros establecimientos. Actualmente, Caprabo cuenta con 350 puntos de venta distribuidos en Cataluña, Madrid y Navarra.
REESTRUCTURACIÓN EN MARCHA
En enero la empresa comunicó su intención de cerrar, el próximo julio, la plataforma que tiene en Noain (Navarra) y proceder al suministro de las 28 tiendas que operan en la Comunidad Foral a través de los tres centros, el que posee en L’Hospitalet de Llobregat (Barcelona) y de los de Eroski, ubicados en Zaragoza y Vitoria (Álava).
El pasado enero, Grupo Eroski, matriz de Caprabo anunció la eliminación del Consejo de la catalana que, a partir de ahora cuenta con un administrador en la persona de Javier Amezaga, máximo responsable de la cooperativa y exdirector general la empresa de supermercados.
La supresión del máximo órgano de gobierno llegaba después de que la cooperativa completase el proceso de integración de su filial, tras hacerse con el 16% del capital que aún obraba en manos de la familia Botet, una de las fundadoras.
Por otra parte, Eroski ha firmado un acuerdo con un grupo de 22 entidades bancarias para reestructurar su deuda. El compromiso alcanzado garantiza la solidez y estabilidad de la cooperativa para los próximos cuatro años, ya que supone la extensión de los vencimientos de sus préstamos a enero de 2017.