Las ventas y el beneficio de Hijos de Rivera se resienten por la crisis sanitaria
En 2020, la facturación de la compañía se contrajo un 10% hasta los 479,1 millones de euros. El beneficio descendió un 30%.
Corporación Hijos de Rivera, propietaria de marcas como Estrella Galicia o Cabreiroá, ha visto impactado su negocio por la pandemia de coronavirus. En los últimos resultados presentados por la compañía correspondientes a 2020, se observa cómo su facturación se ha contraído un 10%, lo que ha repercutido en el beneficio, un 30% inferior a 2019.
Las ventas del fabricante de bebidas alcanzaron los 479,1 millones de euros en 2020, un 10% inferior a lo obtenido en 2019, cuando la facturación se situó en los 532,3 millones. Por categorías, la compañía gallega ha percibido una caída del 18% de la producción de su división de aguas, al pasar de los 198 millones de litros vendidos en 2019 a los 162 millones. Y ha afectado a los tres manantiales del grupo, tanto Cabreiroá como Agua de Cuevas y Fontarel.
Este descenso de ventas ha venido acompañado de un cambio de tendencia en el mix de canales de venta. Pierde peso el canal de hostelería (-18%) y aumenta el canal de alimentación (44%).
Todos los negocios de la compañía han sufrido a lo largo del 2020 con marcados descensos tanto en lo que se refiere a cerveza (-22%), como agua (-48%) o el propio museo MEGA (-95%). En todo caso, el mayor golpe ha recaído en los negocios de distribución (-449%) y de hostelería (-286%) que han sufrido especialmente las restricciones durante el pasado año. Por todo ello, los beneficios de la compañía han descendido casi un 30% situándose en 52,9 millones de euros después de impuestos.
A pesar del descenso de las ventas, la compañía ha continuado sus planes de inversión, al haberle dedicado a esta partida 68,3 millones de euros. De igual modo, la firma dirigida por Ignacio Rivera decidió al inicio de la crisis sanitaria renunciar a aplicar un ERTE a su plantilla y la ha incrementado un 1,1%, hasta alcanzar los 1.250 empleados.