Supersol Spain recortará su plantilla un 10%
Alrededor de 400 empleados de la cadena pueden quedarse en la calle, si finalmente se aplica el recorte de plantilla propuesto por la empresa, que afectaría al 10% de la misma. Una medida necesaria, según Supersol Spain, para la viabilidad de la enseña y su vuelta a los beneficios en 2014.
Supersol Spain, adquirida el año pasado por la firma lituana Máxima, pasa por momentos difíciles. Ha salvado su marca, pero arrastra una deuda de 36 millones de euros y la continuidad del negocio depende del éxito de su nueva estrategia.
La actual dirección ha presentado a los trabajadores una propuesta que supondría un ahorro de aproximadamente 20 millones de euros y en la que entrarían medidas como revisión de los alquileres, traslado de las oficinas a Getafe (Madrid) y ajuste del plan de empleo a la normativa actual en materia de cobertura de indemnizaciones.
El grueso de los despidos (63,6%) se concentraría en Andalucía, donde podrían cesar 229 trabajadores. Le seguiría Madrid (19,92% de bajas), con cerca de 71 empleados menos y Las Palmas (3,59%), donde dejarían su puesto un total de 12 personas. El resto se repartiría en las provincias donde opera la cadena.
No obstante, a pesar de su crítica situación, Supersol ha reconocido que en su planes no figura el cierre de establecimientos, aunque 140 de las 203 tiendas con que cuenta arrojan ‘resultados deficitarios’. La cadena, que también ha anunciado otras medidas como una campaña para abaratar los precios, asegura que ‘en la actualidad no hay deuda bancaria’ y que la situación es mejor que antes del cambio de propiedad.
Por su parte, el sindicato de la empresa ha planteado una alternativa, que contempla un plan comercial de expedientes de suspensión, bajas voluntarias y un acuerdo sobre flexibilidad interna.
Supersol Spain pasó a manos de Máxima como parte de la venta del grupo Dinosol con un 450 puntos de venta, bajo las enseñas Supersol, Cashdiplo e Hiperdino, repartidos entre Madrid, Castilla-La Mancha, Extremadura, Andalucía y Canarias. Los centros del archipiélago canario pasaron a manos de la sociedad compradora AJA Inversiones, formada por los hermanos Domínguez y Javier Puga
