Nestlé Waters se lanza a las aguas con sabor

La filial española de aguas embotelladas del grupo suizo Nestlé ha decidido adentrarse en el sector de bebidas con sabor. La razón de este desembarco, según expuso durante la presentación de Nestlé Aquarel Fruity el presidente y director de la empresa, Lázaro Rivademar, es “el gran potencial del mercado de las aguas con sabor”.

Este lanzamiento obedece a la estrategia empresarial que se ha fijado para los próximos tres años basada en el crecimiento impulsado sobre todo por las marcas estrella del grupo, Aquarel y Viladrau; la mejora de eficiencia y la innovación.

En España el segmento de aguas con sabor sólo representa un 0,5% del total embotellada, mientras que en otros países europeos como Polonia y Francia este porcentaje se eleva al 20%. Desde la empresa española están seguros que el consumo crecerá a medida que entren más actores en el mercado que hasta ahora sólo contaba con Danone y su marca Font Vella Sensación.

Aunque se presenta como un nuevo segmento de agua, el máximo responsable de la división de Nestlé en España no cree que vaya a canibalizar el mercado de esta bebida, “yo pienso que competirá más con otros líquidos como los refrescos”, señaló. En este primer año de vida, la compañía espera simplemente ganar notoriedad, “que la gente lo pruebe y lo conozca”, el número de botellas que se vendan es menos importante. A largo plazo el objetivo es que el agua con sabor aporte un 2% a la facturación española del grupo que el pasado año fue de 85 millones de eu ros, un 20,3% más que en 2005.

Nestlé Aquarel Fruity es un producto sin gas y sin azúcar que se situará en los lineales destinados para el agua pero que ofrece, en palabras de Rivademar, un valor añadido al consumidor de edades comprendidas entre los 28 y 40 años. Su precio de salida para la venta en el canal alimentación será de 0,89 euros el envase de 1,25 litros y de 0,59 euros el de medio litro. Contará con tres sabores distintos: limón, manzana y piña cactus.

Los españoles, según los datos del Panel de Consumo elaborado por el MAPA, bebieron el pasado año 2.225,64 litros de agua mineral, un 5% más que el año anterior. Este consumo supuso un gasto por persona de 50,8 euros anuales.