Europastry, calidad de marca y cercanía al consumidor

“No hacemos marca, la marca es la calidad de nuestro producto”. Así ha definido Marta Cortés, directora de Marketing Corporativo de Europastry, la esencia de su compañía, multinacional española, dedicada a la elaboración de pan y bollería ultracongelada. Innovación, calidad, desarrollo internacional y eficiencia, son los cuatro pilares sobre los que se asienta este negocio, de origen familiar, fundado por Pere Gallés, en 1987.

La directiva, que ha participado en un desayuno de trabajo, organizado por IPMARK, ha explicado que estos principios que han conducido a Europastry al liderazgo de su sector en los mercados español y portugués y a ocupar el tercer puesto en el segmento de masas congeladas en Europa.

Durante el encuentro, celebrado en la planta de producción de la empresa en Rubí (Barcelona), Cortés reveló algunas de las claves estratégicas de la firma. “La única marca con la que Europastry llega al consumidor es con Dots: aquí en Rubí hacemos un millón de Dots al día y los distribuimos por los cinco continentes, desde Australia hasta Dubai”, señaló, advirtiendo que de los cientos de productos y referencias que comercializa Europastry, la única que puede identificar el consumidor final es esta marca de berlinas. En este sentido, Cortés destacó que la empresa no realiza una gran inversión en publicidad, porque la inversión más fuerte la hace en el producto, en la innovación.

Europastry cuenta con diferentes marcas para posicionarse en los distintos canales en los que opera: Horeca (30% de las ventas, con más de 32.200 puntos de venta); Tradicional (40% de las ventas con 16.650 puntos de venta) y Alimentación (30% de las ventas, con unos 12.900 puntos de venta). Sus principales marcas son Fripan, Frida, Dots, Yaya María y Friart.

Además, prioriza la relación directa con el consumidor final, a través de tiendas propias bajo tres enseña: El Molí Vell ( más de 80 tiendas en Barcelona y 70 córners en tiendas OpenCor), L’Obrador (panadería artesanal, hecha a la vista) y Santagloria (cuyo primer local se inauguró en 2011 y ya cuenta con seis establecimientos en Barcelona).

En 2011 Europastry alcanzó una facturación de 380 millones de euros, vendiendo sus productos en más de 20 países. La empresa, con una plantilla de 2.800 trabajadores, dispone de diez centros de producción, nueve en España y uno en Portugal.