Wal-Mart refuerza su dirección estadounidense
La mayor cadena mundial de distribución ha reforzado su organigrama para relanzar su facturación en Estados Unidos, donde las ventas crecieron en 2006 al menor ritmo de los últimos 27 años. Wal-Mart ha nombrado a Bill Simon director general de operaciones de Estados Unidos y a Pat Curran subdirector general de recursos humanos. Los puestos, de nueva creación, responden al propósito de la compañía de reforzar el negocio en el país responsable de las cuatro quintas partes de la facturación global, ha señalado un portavoz de la empresa de Betonville (Arkansas).
Las ventas de Wal-Mart en tiendas con más de un año de antigüedad crecieron un 2,1% el año pasado, a mucha distancia de países como México, donde aumentaron un 5,9%.
Bill Simon es responsable de la división de farmacia, donde ha impulsado la introducción de medicamentos genéricos con receta a cuatro dólares. Simon mantendrá su responsabilidad en este departamento. Por su parte, Pat Curran, que inició su andadura en Wal-Mart en 1983 como trabajador contratado por horas en el departamento de mascotas, venía desempeñando la labor de subdirector de operaciones de la Costa Este. Como responsable de personal de los establecimientos estadounidenses, a Curran le corresponderá capear las presiones que ejercen sindicatos y políticos sobre el mayor empleador del mundo, con 1,4 millones de empleados.
Espionaje
En este esquema se enmarca la denuncia realizada por un técnico de la empresa despedido el mes pasado por haber grabado llamadas telefónicas sin autorización. Según Bruce Gabbard, él mismo formaba parte de una amplia red de espionaje diseñada por la empresa. El sistema estaba dirigido a vigilar no sólo a los empleados, sino también a los detractores de la empresa, a ciertos accionistas y a empleados de la consultoría McKinsey, publica The Wall Street Journal. Bruce Gabbard fue despedido a comienzos de marzo tras haber grabado las llamadas entre el servicio de prensa de la empresa y un periodista del New York Times.