Agua de Loewe, el perfume se hace bebida

El sector de agua envasada cuenta desde hace poco con una nueva marca, Agua de Loewe, homónima del perfume lanzado en 2006 por la empresa española, perteneciente al holding de artículos de lujo (LVMH).

La versión “bebible” de la fragancia es fruto del acuerdo entre Loewe y Solán de Cabras, que ha sido la encargada de llenar las exclusivas botellas de la firma, posicionadas en el segmento premium, que aparecen con un elegante diseño, protegido por un saquito de tela.

El producto, que ha sido presentado en la Expo 2008 de Zaragoza, nace con una edición limitada de 1.500 unidades de 800 ml, a “un precio de lujo” (110 euros botella), similar al de un perfume selectivo, convirtiéndose en el agua envasada más cara de España.

Por el momento, su distribución se limita a la boutique de Loewe en Zaragoza y a las tiendas de la firma en Barcelona (Paseo de Gracia) y Madrid (Gran Vía).

Agua de Loewe se configura como una categoría que escapa a las actuales tendencias del mercado, centradas en la producción de aguas funcionales y aguas con sabores. En todo caso, se trata de un eslabón más dentro de un fluido negocio, que cada año eleva su “caudal” con nuevos operadores.

No obstante, en el último año, el ritmo de crecimiento ha sido menor que en ejercicios anteriores, aún así, en los canales de libreservicio, ha experimentado un aumento del 3,6% en volumen, con un total de 2.964 millones de litros, y un incremento del 6,6% en valor, alcanzando un total de 680 millones de euros, según datos de ACNielsen.