Caprabo cruza la frontera
El sistema de franquicia se ha revelado como una fórmula segura para crecer en el sector retail. Así lo ha entendido Caprabo, que ha extendido sus planes de expansión más allá de nuestras fronteras, con la puesta en marcha de la que será su primera tienda fuera de España, un franquicia en Andorra, que abrirá sus puertas el próximo noviembre.
Esta apertura forma parte del desarrollo de la cadena, que ha previsto ampliar su presencia en el Principado con otros tres puntos de venta franquiciados. No obstante, su objetivo global va más allá. Caprabo quiere inaugurar 100 establecimientos en régimen de franquicia en los próximos cinco años. Algunos de estos proyectos ya funcionan en las provincias de Barcelona, Lleida y Andorra.
El salto al exterior es una apuesta inédita en la estrategia de Caprabo que, hasta ahora, ha centrado su ámbito de operación en Cataluña (su mercado principal, con una cuota del 14%), Madrid y Navarra, regiones en la que suma más de 300 centros.
La tienda de Andorra, con una superficie de aproximadamente 400 m2, presenta el modelo que la compañía denomina “Supermercado del Siglo XXI”, focalizado en un amplio surtido, calidad y precio, con secciones de frescos (panadería, charcutería, carnicería, frutas y verduras).
Las franquicias de Caprabo comprenden locales de entre 300 y 500 m2, ubicados en poblaciones de casi 3.000 habitantes, que potencian la imagen de la cadena, realizan planes promocionales y cuentan con un programa de fidelización, que ya suma más de 1,3 millones de tarjetas.
Jordi Lahiguera, responsable de franquicias de Caprabo, ha señalado “nuestro modelo de franquicias, basado en un formato de proximidad de menor tamaño, nos permite llegar a zonas en las que hasta ahora no teníamos presencia. Andorra es sin duda un mercado idóneo para el desarrollo de nuestro proyecto, por lo que estamos trabajando intensamente para establecernos con varias tiendas en este país”.