Los españoles tienen buenos hábitos alimenticios y una mala calidad de sueño
Nos alimentamos bien, pero dormimos poco o mal. Así son nuestro hábitos diarios en cuanto a temas más directamente relacionados con la salud se refiere.
Son datos de un estudio de SPC en el que un 67 % de españoles consultados afirma tener buenos hábitos alimenticios pero casi la mitad reconoce tener una calidad de sueño baja. El objetivo del estudio, es el de conocer el impacto de los hábitos alimenticios y de sueño en el estilo de vida de los españoles, a través de la propia percepción de conocimientos en materia de nutrición, las horas de descanso y la calidad de sueño.
Alimentación equilibrada
El informe, elaborado con los datos extraídos a partir de los usuarios registrados en la aplicación Smartee de SPC, sitúa a los perfiles de entre 40 y 50 años como los más predispuestos a llevar una dieta equilibrada, con un 16%.
Un 18,2% de los usuarios despunta como defensor de la alimentación sana como forma de vida, siendo la media de edad de 42 años en esta categoría. Por contra, un 15% se declaran seguidores de la comida rápida, aunque en este caso la media de edad se rebaja hasta los menores de 20 años.
Por género, las mujeres se muestran más afines al equilibrio que los hombres, representando a 2/3 del total. Mientras, los hombres defienden más la comida rápida frente a las mujeres. En el caso de la comida como filosofía, las mujeres se ponen a la cabeza.
Según los datos recabados por SPC, la media de peso en usuarios que prefieren la comida rápida es superior al de las otras dos elecciones con 77,4 kilos. No obstante, el estudio ha detectado que el peso medio en gente que prefiere el equilibrio y la que se alimenta de forma rigurosa es prácticamente el mismo, 73 kilos.
En el lado contrario en cuanto a hábitos saludables estaría el tiempo y modo dedicado al descanso. De media, un adulto debe dormir entre 7 y 9 horas todos los días. A pesar de que el 50% de los usuarios de Smartee duermen 7,20 horas diarias, solo el 37% usuarios reconocen que tienen un descanso de calidad alta.
Un 49,93% afirma descansar mal, lo que se traduce en un problema de salud que afecta a la mayoría de la población: de media solo se tienen 3,82 horas de sueño profundo y 2,53 horas de sueño ligero.